Una extraña Luna Llena [Ayato]

No podía hacer otra cosa más que sonreír ante el berrinche de Momoka, para él era algo inusual y divertido. Ayato se quedó ahí, observando con una media sonrisa trazada en los labios mientras ella le gritaba y le seguía gritando. Se preguntó si todas las mujeres de su planeta tendrían esa personalidad tan explosiva pero lo cierto era que era la primera vez que conocía alguien así. Sería un desperdicio matarla después de todo.

El dhampiro se extrañó en el momento que la vio aferrarse furiosamente a un árbol del parque pero luego se paralizó al ver que lo alzaba como si se tratara de un peluche de felpa. El proceso lo desconcertó bastante, incluso se puso a la defensiva por si a Momoka se le ocurría lanzar el árbol hacia él. Una vez ella lo alzó por sobre sí, dirigiéndolo hacia un punto indefinido del oscuro cielo, Ayato se quedó observando cómo este desaparecía en el firmamento con varias gotitas de sudor resbalándose de su frente. Si, tal vez había subestimado un poco su fuerza...

Al voltearse hacia Momoka, de forma muy, muy lenta, y con la impresión aún dibujada en su rostro, ella parecía estar conteniendo algo desde su estómago. Ayato le observó fijamente, dispuesto a atacarla si intentaba algo extraño pero simplemente se largó a reír a carcajadas.

- ¿Qué? ¿Qué es tan gracioso? - Preguntó, sintiendo como si se estuviera burlando de él por lo que sus mejillas se enrojecieron de forma casi imperceptible. - ¡Si te ríes de mí te juro que lo lamentarás! - Bramó furioso, intentando detenerla. Pero ella se detuvo por su propia cuenta, y de pronto estaba absorta en sus propios pensamientos, desconcertándolo aún más. Con el ceño arrugado, preguntó:
- ¿Qué te pasa? ¿Qué tontería estás murmurando?

Momoka se giro para mirar a Ayato a los ojos - Ayato usted es un gran genio - dijo con una enorme felicidad en sus ojos - que acaso no lo entiende?? - dijo toda feliz mientras saltaba de la emocion por alrededor de Ayato - Gracias a ti acabo de terminar mi canción, incluso podria decir que tu me ayudaste en la parte donde estaba sin inspiracion - dijo mientras sacaba una pequeña libreta y un lapiz de su chaqueta blanca la cual estaba manchada por su sangre, se dio media vuelta para escribir la parte que le faltaba en su cancion y luego se la mostro:

Once upon time, a few mistakes ago
I was in your sights
You got me alone, you found me
You found me, you found me

I guess you didn't care
And I guess I liked that
And when I fell hard
You took a step back
Without me, without me, without me

And he's long gone
When he's next to me
And I realize the blame is on me

Because I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
So you put me down oh
I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
Now I'm lying on a cold hard ground
Oh, trouble, trouble, trouble
Oh, trouble, trouble, trouble

No apologies
He'll never see you cry
Pretend he doesn't know
That he's the reason why
You're drowning, you're drowning, you're drowning

And I heard you moved on
From whispers on the street
A new notch in your belt
Is all I'll ever be
And now I see, now I see, now I see

He was long gone
When he met me
And I realize the joke is on me

I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
So you put me down oh
I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
Now I'm lying on the cold hard ground
Oh, trouble, trouble, trouble
Oh, trouble, trouble, trouble

When your saddest fear comes creeping in
That you never loved me
Or her or anyone or anything

I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
So you put me down oh
I knew you were trouble when you walked in
So shame on me now
Pull me to places I'd never been
Now I'm lying on the cold hard ground
Oh, trouble, trouble, trouble
Oh, trouble, trouble, trouble

I knew you were trouble when you walked in
Trouble, trouble, trouble
I knew you were trouble when you walked in
Trouble, trouble, trouble

I don't know if you know who you are
untill you lose who you are

{la parte que esta subrayada es la parte que escribio ahora }

-jejeje - dijo orgullosa de como habia quedado su trabajo - no quiero presumir pero debo decir que sera una buena cancion, creo que deberia darte credito... claro cuando sea una gran cantante y todo el mundo ame esta cancion, todos tendrán envidia de ti Ayato por ser la persona que me ayudo a terminarla - dijo mientras emitia una gran sonrisa - Te gustaria escucharla?- dijo algo emocionada y con un enorme rubor, se sentia tan feliz de querer ver como se escuchaba - tengo mi guitarra alla en la banca, puedo tocarla y me das tu opinion - dijo ella - a todo esto no te he preguntado si estudias en alguna parte o trabajas?? ...aunque a decir verdad no parece que seas tan grande...

Ayato le observó con gran desconfianza pues apenas podía entender a lo que se refería. No le había ayudado en nada, mucho menos pretendía hacerlo, además por más que lo intentara no se imaginaba a esa princesita componiendo algo bueno ni mucho menos arriba de un escenario. Aún con el ceño fruncido, Ayato leyó rápidamente la canción que Momoka acababa de escribir en su libreta.

- ¿Envidia? - Preguntó incrédulo al terminar de leer, enderezándose ante la chica con su acostumbrada arrogancia. - ¿No estás siendo algo pretenciosa? ¿Quién crees que podría envidiarme a mí por ti? ¡No me hagas reír! ¡No eres absolutamente nadie en esta ciudad! - Le aclaró con esa sonrisa que trazaba en su boca cada vez que daba a entender cuán superior era a los demás. - Aunque tal vez tengas razón, soy motivo suficiente como para que cualquier persona escriba toneladas de canciones acerca de mí. Pero ¿por qué justamente debías ser tú? ¿No podía haber sido una bella mujer voluptuosa? Ah~ La vida es tan miserable~ - suspiró resignado ante este último pensamiento.

De pronto Momoka le ofreció si quería escuchar su canción, por lo que el dhampiro se cohibió casi al instante. No entendía cómo la gente podía cantar tan libremente ante otros, como si no significara nada o no les produjera vergüenza. Qué mujer tan extraña, será porque no es de este planeta...

- E-está bien... ¡P-pero te advierto que soy muy exigente! Más te vale no dañar mis sensibles oídos con tu horrenda voz... - dijo entre gruñidos mientras se cruzaba de brazos y le observaba con arrogancia, intentando disimular el rubor en sus mejillas. No sabía si sentirse ofendido con su comentario, Ayato creía verse lo suficientemente maduro como parecer un hombre de trabajo. - Soy sonidista del sello, toooonta~ Estás hablando con un profesional.

- pues no lo estoy siendo - dijo en forma alegre - en eso tienes razón - dijo moviendo su dedo indice de un lado a otro - pero estoy segura que llegare muy alto si me lo propongo - dijo mirando las estrellas

-AHH QUE DIJISTE?! - dijo ella con un rubor ante su comentario ''mujer voluptuosa'' ese comentario le callo como un balde de agua fría, sabía muy bien que no tenía tanto como su madre pero aun asi tenía lo suyo, ' Ui! se me había olvidado que tiene un serio un problema con su ego' penso ella ... Pero había algo que no sabia y tampoco era algo que le gustara presumir ..era una chica muy popular en el espacio por algo era la chica mas solicitada del universo y con mas compromisos de matrimonio... y por supuesto los había rechazado todos porque ellos solo buscaban su estatus social, no querer conocer como era ella - Para tu información soy una chica muy solic... -dijo pero luego se arrepintio, no sabía que sacaría con decirle eso a Ayato, solo dio un pequeño suspiro .

-Tsk!, como que dañar tus sensibles oidos, ni siquiera me has oido y ya dices cosas asi -dijo con una pequeña venita en su frente, este chico si que sabia como hacerla enojar... pero eso era algo que le agradaba de él, se podría decir que la trataba como una persona. Se acerco un poco a Ayato - wooow si eres un sonidista, eso sera genial - dijo emocionada mientras meneaba su cola de un lado a otro - asi sabre como es mi canción, prefiero que me digan la verdad antes de que una mentira, asi sabre cuanto debo mejorar o tal vez puede que cautive tu corazón ~- dijo guiñándole el ojo a Ayato - como si eso fuera a suceder - dijo ella con una sonrisa divertida ante su comentario.

- Pero primero - dijo - tomare alguna medida contigo...- busco dentro sus bolsillos una bendita y se la coloco en su dedo indice y luego de eso saco un pañuelo blanco que tenia escrito sus iniciales M.R de forma muy linda, se amarro el pañuelo en la mano que aun seguia sangrando un poco - si no hago esto no podre tocar bien... -dijo mientras miraba a Ayato.

Luego se acerco a la banca donde estaba su guitarra, la tomo entre sus manos, deslizo sus dedos por las cuerdas para ver si tenia el sonido adecuado que ella quería utilizar, el sonido que emitio era el adecuado, luego de eso dio unos pasos para estar a unos metros de Ayato
-bueno voy comenzar Señor Sonidista ~ - dijo en forma alegre la ultima palabra - espero un critica verdadera y seria de parte tuya

Paso sus manos por las cuerdas y se escucho el primer acorde mientras el viento jugaba con su cabello y de su voz salia la canción.

cancion que compuso Momoka

Spoiler:

Cuando iba cantando ella sentía como se metia en el personaje de la canción, su actitud cambio, sus ojos demostraban una gran determinación, todo lo que transmitian esas letras. Despues de un rato la canción termino, dio un gran suspiro y luego miro a Ayato

-Y dime que opinas?? - dijo mientras daba unos pasos y se acercaba para quedar a unos 10 centimetros de la cara Ayato, poniendose de puntilla - dime la verdad... ~~si mientes tus ojos me lo van decir~~ - dijo esto ultimo con un puchero en su cara

Los nervios de Ayato se crisparon al ver que Momoka le dedicaba un guiño, llegando incluso a producirle un tic en ambos ojos. ¿Acaso esa mocosa intentaba seducirlo?

- ¡N-no me hagas reír! - Le gritó molesto, notoriamente ruborizado. - ¡Empieza a cantar de una vez! - Le ordenó mientras veía como ella empezaba a prepararse con su guitarra para interpretar la canción que tanto presumía. Ayato intentó tranquilizarse mientras apoyaba su retaguardia en una baranda del parque, sin quitarle la mirada de encima.

Momoka empezó a cantar y él se dedicó a escucharle. Cuando la niña levantaba mucho la voz él cerraba los ojos, sus oídos tenían una sensibilidad superior a la humana lo cual le permitía estudiar cada vibración que producía su voz. Estas vibraciones eran transmitidas en forma de ondas y él podía detectarlas como si se tratara de una máquina. Era imposible que Momoka lo percibiera con su limitada capacidad (aunque como no era humana, Ayato no pudo saber qué tal eran sus sentidos) pero con cada nota que cantaba se movía ligeramente el aire e incluso el agua.

No lo hacía nada mal pero Ayato no movió ni un solo músculo mientras ella cantaba, solo se dedicó a analizar la armonía de su canción. De pronto ella se detuvo y le preguntó directamente su opinión, a penas le escuchó dirigirse a él abrió los ojos y la encontró muy cerca de su rostro lo cual le sorprendió mucho, el dhampiro intentó apartarse pero la baranda le bloqueaba el paso.

- T-tonta, no tengo para qué mentirte, no necesito quedar bien contigo ¿o si? - Respondió molesto y un poco nervioso, llevando ambas manos hacia la baranda. No sabía cómo ella pudo acercarse tan rápido sin que pudiese detectarlo, tal vez estaba demasiado concentrado. - Odio el pop, sus letras describen tanta cursilería que me cuesta soportarlo, siempre hablando de que el amor aquí y el amor allá ¡es increíble! Solo a las mujeres les puede agradar algo así, já. - Le dijo acompañándose de una sonrisa pedante, no tenía ni para qué pedirle su sinceridad pues se la daría de todas formas. - Ten cuidado cuando pases a la nota SI, tu voz no es lo suficientemente aguda como para sostenerla sin problemas - dijo a modo de recomendación.

Momoka solo movió su cola mientras observo bien la cara Ayato... ''sera mi imaginación o se puso algo nervioso...'' pensó en su mente.

-Eso piensa... bueno en el gusto no esta nada escrito - dijo ante el comentario de Ayato - yo no creo que sean cursilerías, yo creo... - dijo acercando su mano a su corazón y cerrando sus ojos - Yo creo que una canción, ya sea de cualquier genero: pop, clasico, rock, jazz, etc., refleja los sentimientos de las personas tanto hombres como mujeres, las canciones ayudan al corazón, las situaciones que han vivido, ya sean desamores, su primer amor, sentimientos de celos, de tristeza, las... La canciones tratan de adaptarse a la persona o sentirse identificadas con las letras, al fin la canciones lo unico que quieren es transmitir un sentimiento~ - dijo mientras miraba los ojos Ayato.

-Ooh gracias - dijo interesada por su comentario - creo que tienes muchas razón, debo comenzar a practicar mas para pasar a tono mas alto...- Momoka sintio que de repente su estomago le comenzaba a exigir algo de comida. Un pequeño rubor salio de su rostro mientras una sonrisa nerviosa se dibujaba en su rostro, observo la hora en un reloj que estaba por ahi, eran ya las 2:00 am.
-Etto Ayato - dijo mientras dirigia su mirada al suelo, con un rubor en su cara... porque demonios le daba verguenza decirle que tenía hambre...- gracias por la ayuda, me gustaria pagarte con algo para comer - dijo con una sonrisa y un rubor muy leve pero notorio - Yo creo que con todo este tiempo tu tambien debes tener hambre...o acaso quedaste bien con mi sangre - dijo con el ceño fruncido. Luego se dio media vuelta y dio unos pasos, saco su celular, toco una tecla y aparecio un teclado en aire, Momoka tecleo un par de botones - Acaso come otra cosa? Si es asi, aqui tengo una gran diversidad de comida, tu solo di y lo tendras - dijo girandose a verlo con una sonrisa en su rostro.

- Ehh~ Qué niña tan rara eres, princesa... - comentó con una sonrisa traviesa después de que Momoka acabó con su discurso.

Cuando él cantaba lo hacía por diversión, nunca se había replanteado si realmente sus palabras tenían alguna especie de sentimiento. De todos modos, tampoco era un sujeto que se preocupara mucho por eso. No quiso comentar esto, le daba vergüenza que otra persona se enterara de que él sabía cantar. De pronto ella estaba realmente interesada en sus críticas, a lo que Ayato contestó:

- ¡No entiendes nada! ¡Tu voz no es lo suficientemente aguda y se acabó! No tienes por qué cambiarla, si no eres tú misma no sonará bien... Solo adapta la canción a tu tono y ya está, tsk... qué molesto... - dijo en un impulso, visiblemente irritado.

Pero se arrepintió al instante de lo que dijo pues se había mostrado bastante afectado, intentó desviar el tema con la propuesta de la comida. Ayato se aprovechó de su posición acercándose peligrosamente a la niña, apoderándose de su mentón con una mano.

- ¿Por qué no dejamos el preámbulo y me dejas comerte de una buena vez? Puedo ver que tú también lo estás esperando~ - le propuso acercándose a Momoka de forma pícara.

Sin embargo tenerla tan cerca le hacía recordar cuánta hambre tenía, su aroma le resultaba extraño, lo mismo pasaba con el recuerdo del sabor de su sangre. El dhampiro no sabía si debía volver a beber de ella pues aunque le daba mucha curiosidad, como no era humana siempre existía la posibilidad de enfermarse del estómago. Ante esta idea, decidió liberarla de su agarre, giró su cuerpo y se quedó junto a ella mientras le pasaba un brazo por sobre los hombros.

- Pero... la noche es joven, eh... ¿o es que la nenita prefiere irse a dormir? ¡Jajaja! Vale, vale. Ya que no habrán lugares baratos abiertos a esta hora me conformaré con tu comida del planeta Dabalú o como se llame... Cualquier cosa rápida y sin vegetales estará bien, solo asegúrate de traer mucho de eso, tengo un gran apetito.

-Comerme!!! - dijo con la voz exaltada y un enorme rubor - ESO SI QUE NO!! - dijo colocando su mano formando una cruz en forma de rechazo ante su propuesta.

Luego sintio como su brazo se coloco en sus hombros, un pequeño rubor se dibujo en su cara, estas reacciones la sorprendian demasiado o la descolacaban un montón, su cola se erizo de forma automática.

- No soy una niña pequeña y nosotros podemos estar despiertos toda la noche si nos lo proponemos, y es Deviluke no Dabalu~ - dijo en un puchero mientras tenía el ceño fruncido. Luego giro un poco su cabeza para mirar a Ayato pero se dio cuenta de que estaba muy cerca, podia sentir su fragancia...era rara, en verdad esta era la primera vez que sentía la fragancia de un hombre ademas de su padre, esto hacia que su corazón latiera muy fuerte ''creo que debería interactuar con mas hombres...para quitar este nerviosismo...'' penso en su mente. - Pues si es muy buena, pero dime que quieres...-dijo mientras volvia a apretar los botones y aparecía una pantalla en el aire con varias opciones de comida: comida chatarra, japonesa, china, italiana, indu, etc. Acerco su mano y apretó un botón de comida japonesa y salieron distintas opciones: sushi, takoyaki, croqueta de pescado, Momoka apretó la opción de sushi y aparecio un plato de sushi al frente de ellos, Momoka estiro su manos para atraparlo y lo tomo.

- MMMMMM!!!~ - dijo ella de la emocion - No hay nada mejor que comer sushi en la noche - dijo mientras meneaba su cola - y bien elige~ - dijo observándolo - solo tienes que apretar la opción de comida y listo aparecerá - dijo mientras tomaba un pequeño sushi entre sus manos y se lo comía -Cualquier cosa que no entiendas me preguntas - dijo observando a Ayato
-La comida esta muy buena - dijo mientras comía otro bocado de sushi.

Momoka estaba empeñada en que Ayato eligiera algo para comer en lugar de simplemente dejar que succionara de su sangre, y él aceptó la propuesta ya que la idea de alimentarse de ella por el momento seguía siendo arriesgada. Paseó la vista por la pantalla táctil estilo holograma que ofrecía comida de todas las variedades, Ayato observó el objeto con gran curiosidad pues... ahora que se fijaba nunca había visto algo así en su vida, ¿qué tan superior era la tecnología del planeta ese?

- Oye... si yo quisiera visitar el lugar de donde vienes ¿tendría que irme en cohete, en avión o qué? - Preguntó de repente y por simple curiosidad, acercando un poco su rostro al de ella para observarla más de cerca. Si se olvidaba de su cola por un rato, omitía su fuerza sobrehumana y el sabor de su sangre Momoka no era muy diferente de las niñas normales... al menos en apariencia, no podía ignorar tan fácilmente su excéntrica personalidad. - No tengo para que pedir tus indicaciones, ni que fuera un retrasado... - respondió sarcástico a sus amables ofrecimientos pero tal y como Momoka pudo suponer, Ayato no tenía idea de cómo funcionaban esos aparatos y se limitó a manosear la pantalla táctil con torpeza, eligiendo todos los items que esta ofrecía.

- Ya está ¿y ahora qué?

De un momento a otro ambos fueron cubiertos de pies a cabeza con una infinidad de platillos de comida. Los preservados en plásticos y embaces simplemente hicieron bulto al rededor de ellos pero los platos servidos como sopas, pastas, pasteles, jugos, entre muchos otros, se desparramaron por sobre sus cabezas como si todo eso se tratara de una estupenda broma del día de los inocentes. Ayato quedó con los ojos abiertos de par en par con un plato de miso volcado sobre su cabeza... sin entender nada, recogió un paquete de patatas fritas y se dedicó a comer a pesar de todo.

-Pues a decir verdad...- dijo colocando un dedo indice en su mejilla - no creo que todavia hayan inventado una nave que pueda llegar a mi planeta, es más...-dijo ella - los cohetes que utilizan para llegar a la luna toman mucho tiempo, y llegar a mi planeta en unos de esos... lo mas probable es que demore muchos años y que solo pueda hacer un viaje de ida ya que llegarían como abuelos, así que te recomiendo ir en una nave espacial, son mas rápidas - dijo sonriente

-Bueno, yo solo queria ayudar - dijo con un puchero ante la reacción de Ayato...''porque es tan orgulloso, no es malo pedir ayuda de vez en cuando ~'' penso en su mente.

Luego vio como Ayato comenzó a apretar varios botones de la pantalla, esto le dio una mala espina a Momoka, su cara se puso algo blanca. Luego vio como todas las comida que había elegido aparecieron sobre ellos, sintió como un jugo de frambuesa le callo directamente encima de su cabello, y como era manchada por las distintas sopas, pastas... salio de la montaña de comida que había ordenado Ayato, se giro hacia él y miro su cara, ''que mono~'' pensó en su mente al ver la reacción de Ayato después de haber apretado los distintos botones y luego haber sido sepultado por comida, además una sopa miso le había caído en la cabeza. Ella espero por su parte que mandara todo a volar pero Ayato solo se resigno a coger una bolsa de patatas fritas y no decir nada, una pequeña sonrisa se dibujo en su cara... era tan orgulloso que no admitía lo que había echo, pero esto le pareció muy tierno de su parte.

Momoka se giro y lo miro mientras él comía su paquete - Estan ricas? ~ -pregunto con una sonrisa tierna en su rostro

Ayato estaba concentradísimo en seguir comiendo sus patatas, no le molestaba en absoluto la suciedad, de hecho solía acabar en estados así de impresentables cada vez que salía a hacer alguna travesura... la única diferencia sustancial se relacionaba con que en otras ocasiones se ensuciaba con barro o con sangre. Siguió comiendo como un muerto de hambre, la comida humana no le satisfacía ni la mitad de lo que lo hacía la sangre por lo que debía compensar la falta en tamaños industriales.

Pero se detuvo al sentir la mirada de Momoka posada sobre él, le observó con los mofletes llenos de comida y un rubor instantáneo se apoderó de su piel normalmente blanca como el mármol.

- Ah... ¡¿Q-qué tanto miras?! - Espetó después de dar una buena tragada, sin responder a su pregunta y nervioso de sentirse observado por ella... ¿le iría a regañar por lo que había hecho? ¿O estaba molestándolo? Fuera la razón que fuera, le mosqueaba. - ¡Deja de hacerlo! ¡Para empezar todo esto es tu culpa! ¡Usar estos artefactos en un lugar donde la gente no está acostumbrada es ilegal! - Se defendió muy molesto, dándole la espalda.

Mientras Ayato intentaba huir de la situación apartando la comida de su camino y retirando el plato de su cabeza, fijó la mirada en el reloj de la calle. La hora apuntaban las 2:45 AM, el frío de la madrugada empezaba a sentirse aunque no era algo que le molestara.

- Oye ¿tú no tienes que volver a tu casa? - Preguntó volteándose a ella, pero se retractó en el acto pues esa frase había sonado algo aprehensiva. - N-no es que esté preocupado por ti o algo... solo que eres una mujer y... las calles son peligrosas... y... eso... - dijo en un balbuceo explicativo.

Momoka se percato que su mirada estaba poniendo algo nerviosa a Ayato, esta idea le pareció aún mas adorable de su parte, debido a esto no dejó de sonreír de forma tierna - Solo miro.... - dijo ella - Por eso te dije que si necesitabas ayuda, y no son ilegales, son completamente legales, puedo usarlo para poder sobrevivir en este planeta...- dijo mientras lo miraba con el ceño fruncido y sus mejillas infladas. Luego dirigio su mirada a la comida que estaba alrededor de ellos, vio como Ayato comenzo a apartar la comida y se alejo de ella un poco, luego vio como este se detuvo y se giro a verla

-Pues yo? - dijo señalándose a si misma con su dedo indice ante el comentario que dijo Ayato, luego recordó algo muy importante... CASA. Su cara se puso blanca ante la idea, puso sus dos manos en su cabeza - ES VERDAD!!!! AUN NO TENGO DONDE DORMIR!!! - dijo en un grito, - que hare?? - dijo corriendo de un lado a otro. Luego se detuvo un momento y se puso pensar en soluciones a este problema - podria dormir en una rama por mientras o en esa banca de ahi - dijo señalando la rama de un árbol o la banca - mañana en la mañana ire a buscar un lugar donde vivir -luego mostro una mirada determinante.

Luego noto la reacción de Ayato - mmmm~ en eso tienes razón, soy una mujer...- dijo - aunque tampoco soy una mujer normal... pero me han dicho que las calles de este mundo pueden ser peligrosas... aunque pueda defenderme debo tener cuidado ya que pueden encontrar mi punto debil - dijo ladeando su rostro a un lado - que me recomiendas que haga Ayato?? - dijo algo confundida, mirandolo con ojos brillantes

Contempló divertido a la niña pues su reacción había sido un tanto inusual, estaba aparentemente desesperada por su situación. Ayato se limitó a reír por lo bajo, relajándose un poco.

- ¿Llegaste a la ciudad hoy? ¡Eso explica muchas cosas, jajajaja! - Dijo con soltura, volviendo a esbozar una traviesa sonrisa en su rostro. - Si quieres puedes venir a quedarte a mi casa, no es exactamente un hotel pero es mejor que dormir en la calle... - le ofreció sin pensárselo demasiado. Su departamento estaba hecho un desastre y no estaba ubicado en el mejor lugar de la ciudad, de hecho, lo más probable es que Momoka se retractaría al instante una vez estuvieran allí, pero no le importaba, ese instante era lo suficientemente divertido como para prolongarlo y una vez que dijera que sí difícilmente se escaparía de sus garras.

Además, esa mujer tenía tonalidades de comida en su pequeño aparato ¿qué más podía pedir?

Ante esta propuesta, Ayato se volvió hacia ella y caminó en su dirección, atrapando su cintura y atrayéndola hacia él, mientras le observaba con perversidad.

- Pero... te dejaré venir solo con una condición... satisfacerás la curiosidad que siento por esa sangre tan rara que fluye por tus venas, entiendes a lo que me refiero, ¿verdad? - Preguntó con voz áspera, mientras deslizaba su mano libre por la mandíbula de la extranjera para después retirarla. - Descuida, no te mataré~ - Al menos no todavía. Se saldría con la suya hasta el final.

- agggh? - dijo ella ante la insistencia en beber su sangre -noooo... es algo que no me gustaría repetir, es como ir al doctor, pero si quieres te puedo regalar uno de estos aparatos y no te preocuparas mas por comer por lo menos durante año  - dijo  

-EHHH!! Por que? - dijo alterada y ruborizada - ¡¡¡y claro que no se a lo que te refieres!!!!! - dijo entre enojada y nerviosa por que no tenía idea de que iba a suceder con ella. Luego le miro con ojos bajos pero con un tono de amenaza - espero que no se te ocurra volverme a morderme... si lo haces no me quedara otra más que dejar mi instinto de deviluke salir - dijo mientras emitía un aura de peligro.

Cuando se dio cuenta de la distancia y de que una mano pasaba por su cintura de forma muy prisionera su cara se ruborizo de una manera muy notoria. Luego sintio esos delgados y helados dedos por su mentón, un escalofrio recorrio su espina dorsal hasta llegar a su cola... ''porque tiene estos cambios tan rápidos, lo unico que provoca es que me descoloque más... '' penso ella.

-acepto tu invitación pero la condición no me agrada para nada...-dijo ella muy correctamente.

-Bueno si una mujer va a tu casa o la llevas a tu casa, en nuestro mundo, se convierte en tu futura novia, o en un objeto o algo asi, es como una prisionera, pero como estoy aquí y no rige eso no podría suceder. Eso seria un gran escándalo, me obligarían a suceder el trono y esa persona seria el hombre mas fuerte de universo... pero vamos... o lo otro seria que yo me someta a esa persona descubriendo mi punto debil...- rie de forma graciosa - eso no sucedería

Ante su negativa el dhampiro arrugó el ceño de forma pronunciada. Molesto, Ayato apartó sus manos de la extranjera y las escondió en los bolsillos de su pantalón, observándole con cierto desdén.

- Tch, ¡sin sangre no hay trato! - Protestó con el orgullo seriamente herido, bajando la vista hacia el extraño aparato que Momoka le obsequiaba. - Me ofreces algo así con tanta facilidad porque no me entiendes, la comida humana no tiene gran sabor. Es como tomar del mismo vaso de agua una y otra vez, tu estómago se llena pero la sensación de apetito no se pierde, no te proporciona ningún tipo de placer, ¿y tú esperas que me contente con eso? ¡No me jodas! - Contestó entre gruñidos, dispuesto a marcharse del lugar al no haber obtenido lo que quería.

Existían pocos alimentos que Ayato efectivamente podía percibir con sus papilas gustativas, pero ninguno de estos le satisfacía tanto como la sangre.

Lamentablemente debía acatar la amenaza, si no estaba dispuesta a cederle sangre por su voluntad debía obligarla, y hacer eso no traería otra consecuencia más que una disputa innecesaria. No sabía cuán poderosa era la especie de Momoka y él no era un vampiro especialmente fuerte. Tomaría precaución, por el momento, no era un imbécil por más que lo pareciera.

Encorvándose ligeramente le dio la espalda y se alejó de ella a paso tranquilo.

- ¡Já! ¡No necesito comprometerme contigo para llegar a ser el hombre más fuerte del universo! ¡Qué tontería! Tu planeta tiene tradiciones muy extrañas - comentó lo suficientemente fuerte como para ser escuchado, sin detenerse. - Hallaré tu punto débil de todas formas, no hay necesidad de decirlo... - murmuró más para sí mismo que para ella, continuando su camino, adentrándose en la parte más frondosa del parque. - Cuando ese día llegue te forzaré de todas formas...