Helping A Star (Priv. Aria)

Lógico, desde que se había enterado de su papel en la obra y con mayor razón después del primer ensayo, se había esforzado todos los días para memorizar su parte, ensayando sus líneas, su canto y su movimiento en escena, pero aún debía perfeccionar el cómo ser más "masculina", ¿siquiera cómo iba a lograr eso si contadas veces en su vida había usado un pantalón? Está bien, la ropa no siempre lo es todo, pero si hablamos de personalidad, Aria podría describirse como cualquier cosa menos masculina, ¿qué podría hacer? Necesitaba encontrar algún compañero de prácticas que pudiera enseñarle más sobre eso, alguna especie de modelo a seguir, y cada vez que intentaba traer a su mente alguna opción, sólo aparecía una persona y se lamentaba por conocer tan poca gente. "Claro, Lucien es masculino pero supongo que es demasiado sereno para un papel así, hasta calzaría más como Romeo... ¿es que acaso todos los de la clase son nenas?" pensó en su exasperación, ya de camino a la sala de ensayos para una de sus prácticas diarias, siendo que ya había ido a preguntar a la secretaria en qué horarios se solía ocupar frecuentemente el salón para no importunar a nadie.

Ella misma se había armado una lista de reproducción en su aparato de mp3 con varias canciones para practicar. Si bien no tenían nada que ver con Romeo y Julieta en su letra, prefería enfocarse en la intención, en algo que le permitiera representar mejor su papel, sentirlo como si la espada fuera una extensión de su brazo para no estarlo agitando a cada rato cual bastón de anciano.

Finalmente fue a conectar el aparato para que resonara en unas bocinas que habían por ahí para pararse en el centro del lugar, tomando aire para calentar su voz en lo que iniciaba la canción, repasando algunas líneas en su mente y estirando sus brazos. Se paró firme pero con sus piernas separadas, ambos brazos juntos al frente como si sostuviera una espada en sus manos.


Pensaba en Benvolio que siempre tenía a su amigo Romeo en mente, que sólo buscaba la paz entre ambas familias, entre todos, no más guerras para nadie. "¿Esa paz que tanto desean podrá alcanzarse?" ella sabía muy bien la respuesta a aquella pregunta, pero debía ser Benvolio, permanecer en la incertidumbre pero aún así mantener la fuerza para seguir adelante, aferrándose a la esperanza.


Dio unos cuantos giros para realzar su punto, haciendo un corte en pleno giro como haciendo un énfasis, pero justo en ese instante la puerta se abrió para dejar pasar a una chica. Viéndose observada, le invadió la sorpresa y trató de interrumpir sus movimientos con tal suerte que su pie terminó por resbalar, haciéndola caer sentada en el suelo– A-aaauuch...... –se sobó la zona afectada antes de ver a la recién llegada– L-lo siento, ¿ibas a ocupar la sala...? –gracias al cielo el piso era de madera y no de cerámica, por lo que no le costó mucho volverse a poner en pie. Cuando miró de nuevo a la joven se sintió algo curiosa, ¿la habría visto antes? No que ella recordara, seguramente debería de ser de algún otro curso con los que no mantenía mucho contacto.

—Perdón... me... eh... pillaste por sorpresa, jeje... –se rascó la nuca para bajar del escenario con intenciones de saludarla– No quiero ser ruda pero, ¿eres nueva? ¿acaso de primero o segundo? No recuerdo haberte visto por aquí... si es así bienvenida a Musette entonces, yo soy Aria Ainsley, ¿y tú? –le preguntó con aire amistoso, sacudiéndose las ropas.

¡Pero miren quien era la protagonista de aquella escena! Era su alumna Aria quien se esforzaba en hacer una interpretación por su cuenta y si prestaba atención se trataba de su rol en la obra de Romeo y Julieta. No le interrumpió para evitar quitarle aquel momento de inspiración y disfrutó de aquella actuación y canto.
Aunque terminó involucrandose al ver como había tenido ese accidente, corriendo apresurada al escenario.

- ¡Lo siento muchísimo! te terminé distrayendo - le contesto preocupada por ella pero aliviada de que no hubiera pasado a mas la situación - Oh, si... Soy de 2º año, me llamo Lilith Howell, soy nueva aquí así que decidí pasearme por la escuela. - dijo con una amplia sonrisa. Solo con sus alumnos usaría su apellido, siendo precavida en caso de que se encontrara con algo indeseable y deseara usar su inventada "influencia" con una de las profesoras de la escuela. - Por cierto ¿qué era lo que estabas haciendo? Cantabas muy lindo.

Tenía que jugar al tonto por un rato, no podía actuar como si supiera todo sobre la escuela y sus alumnos, por que solo se levantarían sospechas de su persona y la relación de aquel personaje creado y su verdadero yo.

Por más que mirara a la chica no conseguía recordar si la había visto en alguna parte antes o no, así que siguió manteniendo su teoría de que había llegado no hace mucho y, sumado a que mantenía poco contacto con los alumnos de cursos menores al suyo, la tez morena de la joven no era muy común en la academia que digamos.

—¡No, no pasa nada, de veras! A-aunque sí me dolió un poco la caída, debería acostumbrarme de todos modos, supongo que en la obra me daré unos cuantos golpes contra el suelo... –dijo entre suaves risas mientras se sobaba un poco donde se había golpeado como para hacer énfasis en el tema.

—Entonces, mucho gusto, Lilith... ¿eh, Howell? –titubeó un poco mientras extendía la mano hacia la chica en un saludo, frunciendo levemente el ceño– Howell... ¿como en Katherine Howell, la profesora? Si no es mucha la indiscreción, ¿son ustedes parientes? –preguntó con un aire de confidencia– ¡Por favor discúlpame si pensé mal! –movió sus manos frente a su rostro para quitarle importancia al asunto y peinó un poco su cabello– Es sólo que... bueno... –carraspeó para cambiar el tema que podría haber sido algo incómodo para Lilith en tanto rascaba su nuca, cosa que hacía cuando se sentía un tanto incómoda o avergonzada por algo– Muchas gracias por el cumplido aunque aún debo perfeccionarlo... se supone que debo actuar como un chico... resulta que terminé siendo Benvolio en la obra de Romeo y Julieta que está organizando la escuela y... no digamos que me veo muy masculina... aun disfrazada no sé si logre conseguirlo

Su hablar cada vez se hizo más apesadumbrado y lento, como si estuviera cansada o con un aire de derrota, y puso una mueca de frustración ante la idea de rendirse por fallar en verse como ella esperaba. Si tuviera de su lado la vestimenta y la actitud correcta, ¿sería capaz de hacer bien su papel?

No había pensado mucho en el tema de las sesiones de práctica, se suponía que eso lo verían de común acuerdo durante las reuniones de ensayo para la obra. Por un momento le tomó por sorpresa que Lilith no supiera mucho de la obra, dado lo plagada de carteles que estaba la academia promocionando la futura venida de ésta, pero luego recordó que era normal, considerando que era nueva, detalle que se le había pasado por alto.

—Es de Romeo y Julieta. Si te fijas bien en los pasillos verás carteles por aquí y por allá, aunque aún estamos en fase de ensayos y demases, nos queda un trecho por delante todavía –dijo un poco pensativa, era cierto que la obra tenía un buen camino por delante, así que esperaba que pudiera ver pronto la luz.

—No pensé que la profesora Katherine tuviera una sobrina, ¡sí que te le pareces bastante! Uhm... aunque... bueno, lo siento, seguro te lo deben de decir a menudo... –en ese momento recordó el acuerdo que tenía con su profesora sobre ensayar en conjunto y pedirle consejos después del término del siguiente ensayo general de la obra, por lo que tenía que estar lo más preparada posible. Era por eso en primer lugar que estaba allí practicando.

—Bueno, había considerado eso de ver otras adaptaciones de Romeo y Julieta, pero todavía no me he dado el tiempo suficiente entre estudios y todo eso... –hizo unas cuantas muecas al decirlo, no era que rechazara la idea, pero sentía que le faltaba algo más por hacer– Wow, ¿en serio hizo de hombre? Bueno, no sé por qué me sorprendo, con su trayectoria era de esperarse. Entonces, con mayor razón tendré que pedir su consejo... –su rostro se ruborizó un poco ante la mención de la "delantera" de la profesora Howell, bajando su mirada hacia la suya– Supongo que tendré que vendarme un poco... espero que funcione... –acotó con una risita nerviosa, casi diciéndolo para sí.

—Lo siento, divagaba un poco... ¿qué es lo que te dijo? –incluso se acercó un poco inconscientemente, como si estuviera a punto de escuchar algo muy confidencial.

Suspiró un poco cansada al pensar en todos los deberes que tenía tanto para con la obra y con la escuela.

—Sí, debería... ambas son muy exigentes, pero no voy a abandonar la obra pase lo que pase, me gusta muchísimo la idea y... sería un problema para todos el encontrar un reemplazo a estas alturas, ¿verdad?

Sacudió su cabeza para quitarse la idea de la mente y escuchar con atención lo que su compañera tenía que decirle.

—La gente siempre va a discriminar por el físico antes que por el talento, ¿oíste de Susan Boyle alguna vez? –recordaba que aquello había sido gran tema de conversación en su casa– Recuerdo que mi madre decía que no entendía cómo alguien tan fea podía cantar así de bien... bueno, es raro siendo que ella cantaba hace años... quizás es algún resentimiento suyo, creo que odia demasiado la música por alguna razón que nunca he podido entender, cada que le pregunto se enfada o cambia de tema... ¡perdona si te interrumpí demasiado con tonterías, por favor sigue!

Muchas veces le daba vergüenza quedar de ignorante con temas que parecían ser de conocimiento de todos, sobre todo si eran relativamente actuales. Lo único que conseguía era sentirse más aislada, recordando en parte los días que pasaba en su casa.

—Lamento la pregunta, pero... ¿no que los drag suelen ser femeninos? Perdón, no sé mucho de estos temas, apenas y conozco el término travesti... ¡espero no te ofenda! No lo digo con malas intenciones.

—¡E-es verdad! Nadie es completamente indispensable o irremplazable, pero creo que sería problemático para la academia hacer un nuevo casting...

Asintió aliviada de que coincidiera con ella en repeler esa forma de ser de las personas, odiaba tanto que el medio artístico pudiera ser así de superficial... luego frunció el ceño ante el comentario sobre su madre. De todos modos no quería entrar en demasiados detalles con su compañera sobre las circunstancias que le habían llevado a esa academia, su huida de casa, su temor a ser llevada de vuelta por la fuerza...

—Entiendo el punto y es verdad, pero no puedo imaginarme una razón sobre qué es lo que podría haber pasado para hacerla cambiar así... ¿Nunca oíste de Liora Evengarde? Bueno, ella es mi madre, si es que te suena su nombre de algún lado... –se quedó un tanto pensativa ante la idea. En efecto, ¿qué podría haberle pasado a su madre? Estaba segura de que si intentaba preguntarle no recibiría respesta alguna... mucho menos ahora que tenía nulas intenciones de regresar a casa.

Enrojecieron sus orejas, aún algo avergonzada por la confusión (o más bien desconocimiento) de los drags y travestis. Probablemente se seguiría ruborizando de la vergüenza cada que alguien mencionara la palabra. Sólo se limitó a bajar la mirada después de la palmada en la espalda.

—Digo... sí, gracias... dios, creo que tendré que conseguirme uno de esos... siento que voy a asfixiarme tarde o temprano si uso vendajes... –murmuró al referirse a sus pechos, ¿realmente había una forma de vendarlos para parecer más masculina sin que fuera muy doloroso o perjudicial para sus pechos?

Asintió con la cabeza, consciente de la importancia de lo que le estaba diciendo su compañera.

—Es verdad, es una responsabilidad muy grande... imagina cuando alguien se enferma a mitad de camino de un ensayo para una obra grande, probablemente son reemplazados, ¿verdad? –entonces palideció un poco ante la idea de caer enferma antes que se llevara a cabo la obra de Romeo y Julieta.

Pasó saliva sonoramente, pero se atragantó por lo repentino de la noticia que acababan de darle– ¡¿Eh...?! ¡¿Cómo que no?! ¿P-por qué...? Q-quiero decir... ¿la profesora está bien? –habló con las palabras bastante atropelladas al asustarse bastante por el tema, no tanto por la obra, sino por el bienestar de su profesora... y en el fondo, también tenía que admitir que le preocupaba el futuro de quién le enseñaría las lecciones privadas que había acordado con la profesora Katherine. El futuro se veía incierto– Por favor, si la ves, ¿le das mis saludos? Ojalá esté bien y su ausencia no sea por algo tan grave... –murmuró un tanto preocupada.

Su mente se calmó y se aclaró un poco más con la llegada del cambio de tema en la conversación, aunque en el fondo de su cabeza seguía rondando el tema de la profesora, ¿estaría el resto al tanto de que no podría seguir a cargo de la obra? ¿Quién sería su reemplazo entonces?

—Oh... desplazar... –carraspeó un poco al hacerse la imagen mental– Entiendo, mejor así entonces, no voy a asfixiarme –agregó con una risita algo nerviosa.

Se mordió sus labios en el momento en que sintió la presión caer sobre ella. Entonces eso significaba que lo mejor era que no se enfermara o que nada le ocurriera, por el bien de su permanencia en la obra. "No he llegado a estas alturas del camino para que algo me saque como si nada, no voy a dejar que pase" pensó con toda la convicción posible.

—Ya veo... espero que esté mejor pronto, el estrés es lo que peor puede hacerle a un cantante... y a un profesor... –suspiró comprensivamente– Además creo que suele tener muchas cosas que hacer, eso no le hace nada bien....

Aunque en el fondo ahora volvía a preocuparle el asunto de sobre quién podría ayudarle en en su búsqueda de un tutor que le enseñara cómo comportarse como un hombre... ¿realmente podría lograrlo sin caer en algún ridículo estereotipo o sin exagerar demasiado? "No... en vez de cuestionarlo tanto, tengo que empezar a trabajar en eso, a como de lugar..."

—Bueno, ahora que lo mencionas... sí... creo que tienes razón... –suspiró con una leve sensación de derrota en inicio pero logró reponerse– Creo que ese es mi problema principal en este momento... supongo que tendré que buscar a alguien que pueda echarme una mano con eso –comentó algo pensativa.