Noche de copas (libre)

¿Salir? -Se preguntó con algo de miedo en sus propias palabras, no era propio de ella, más bien era Satsuki la que solía escapar por las noches e ir a divertirse, pero esa noche, la idea de hacerlo ella misma sonaba bastante tentadora, se mordió el labio y luego sonrió ampliamente, una nueva experiencia no estaría mal para nada-

Decidida, decidió ponerse un lindo vestido rojo con tacones a juego y dejar su largo y rizado cabello suelto, se preguntó si aquello estaba bien, pero al no tener experiencia no pudo saberlo, tomó un pequeño bolso y salió de su habitación del hotel con algo de nerviosismo, aquella era su primera vez haciendo algo como eso, por lo que esperaba que la situación resultara bien. Tomó un taxi y se bajó en una calle llena de pubs y locales para divertirse, se paseó entre ellos por unos momentos, recibiendo diferentes invitaciones para entrar a éstos, hasta que vio uno que le pareció apropiado, entró observando con curiosidad y se sentó en la barra, junto a un chico rubio, como su personalidad se lo indicaba, simplemente saludó sin tapujos ni vergüenza, aunque ligeramente sonrojada- Hola ¿Qué tal? -Preguntó sonriendo-

-Se acomodó en el asiento con una sonrisa mientras arreglaba bien su falda, asintiendo con una sonrisa a sus palabras de saludo- Si, pensé que sería divertido, es primera vez que vengo a un lugar así a decir verdad -Rió cubriéndose la boca con el dorso de su mano y observó al otro- Mucho gusto, mi nombre es Natsuko -Extendió su mano con delicadeza hacia el otro, en señal amistosa, esperando terminar con las presentaciones necesarias y poder seguir conversando normalmente-

Oh, no, no, yo no bebo, solo vine aquí a distraerme un poco, jamás he bebido, ni siquiera sabría qué trago pedir -Rió divertida y algo avergonzada de su propio comentario ya que estaba bastante grande como para ni siquiera saber beber y que aquella fuera su primera vez en un lugar como ese-

-Sonrió amablemente y algo sonrojada al beso recibido en la mano pues no se lo esperaba, aunque para ella toda muestra de afecto era enormemente bienvenida- El gusto es mio y no se disculpe, es agradable conocer a alguien con tan buenos modales -Sonrió con amabilidad nuevamente y luego contestó a su pregunta- Soy nueva en la ciudad, llegue hace poco y fui contratada como Idol en merveilles records, recién estoy conociendo y a decir verdad es primera vez que vengo a un lugar como éste -Rió disimuladamente ante tal confesión y miró a su al rededor, el lugar parecía agradable y tranquilo y eso la hizo pensar que no estaría mal salir de vez e cuando.

Bueno, es que es primera vez que me doy el valor de venir a un lugar como éste, normalmente duermo temprano, pero hoy un espíritu aventurero se apoderó de mi y quise salir a ver que tal era todo, tuve mucha suerte de encontrarme con alguien tan amable como usted -Le sonrió con aquella dulzura natural en ella y mirando hacia la barra dubitativa, se preguntó si debería probar algo de beber-
¡Oh! ¿En serio? -Exclamó en sorpresa y con una sonrisa- Vaya, que pequeña es ésta ciudad ¿No? yo llegué apenas hace poco, por lo que no tengo un manager ni he debutado, de hecho aun no veo a uno así que no sé qué tan seguido nos podamos encontrar, aunque de verdad espero que si nos veamos seguido -Bromeó riendo con aquella risa fácil que abandonaba sus labios de vez en cuando- Vaya, Inglaterra, siempre he querido ir ahí ¿Es un lugar bonito? -Inquirió sin dejar de sonreirle-

Me da un poco de miedo a decir verdad, agradezco estar con alguien que trabaja en el mismo lugar que yo, realmente sería muy mala suerte haberme encontrado con algún tipo raro o algo así -Rió divertida, sus mejillas se sonrojaron y se volteó hacia la barra para pedirle al bartender que por favor le preparara algo suave y dulce que pudiera tomar pero que no la emborrachara, cosa que le hizo gracia al hombre, pero se dedicó a preparar el trago para ella- Moderación ante todo, de eso no se preocupe, soy una persona cuidadosa -Aseguró con media sonrisa y el rostro aun ligeramente sonrojado-
Oh, sería ideal, en realidad no tengo un Manager y he estado en busca de uno, si no le molestaría ayudarme, me gustaría ir a hablar con usted uno de estos días en la compañía -Sonrió con entusiasmo, vaya que había tenido suerte aquella noche-
-Luego, volviendo al tema del hogar del otro, no pudo menos que sonreírle con calidez- Me imagino lo bello que debe ser, es precisamente ese ambiente victoriano y antiguo el que siempre me ha atraído hacia esos lugares, me gusta la lluvia constante y la campiña inglesa, dicen que es una maravilla realmente...

Debo tener cuidado ¿No cree? Tuve que tomar mucho valor para salir por mi misma, ahora beberé solo un poquito para probar que tal y nada más, después de todo, es mi noche para divertirme -Sonrió amplio al otro y tomó el trago que el bartender le ofrecía, era rosa y olía a fresas, sus favoritas, le sonrió al dar un sorbo- Sabe muy bien, pensé que el licor sería amargo -Se admiró con una amplia sonrisa algo infantil, como la de un niño que conoce algo nuevo por primera vez-
Volviendo al tema del sello se puso algo más seria- Así es, está permitido tener dos artistas a su cargo, si no le molesta me encantaría tener al fin un manager para poder debutar... Pero tiene razón, ya podremos hablar de eso en la oficina, ahora solo relajémonos, a eso vinimos y podemos aprovechar de conocernos mejor si trabajaremos juntos de ahora en adelante -Sonrió amplio y luego contestó a la pregunta ajena- Yo vengo de Japón, vivía en un lugar cerca del campo con mi familia, por lo que estoy acostumbrada a los cambios de clima bruscos, ya sabe que Japón, al igual que inglaterra, es una isla y por ende el clima es similar -Sonrió nuevamente y luego de pensar unos momentos alzó su vaso y se lo ofreció al otro en un brindis- Brindemos... Por los encuentros que traen buena suerte -Sonrió ampliamente-

Así es y tengo alguien que siempre me cuida la espalda en caso de necesitarlo -Sonrió con cariño y llevó su mano a su pecho, casi podía sentir la presencia de Satsuki con ella y eso la tranquilizaba-

Oh, ¿habla en serio? Entonces tendré cuidado y creo que beberé solo éste, no quiero tener problemas luego, no sé qué haría borracha y en un lugar como éste, no quiero ni imaginármelo en realidad -Se estremeció ligeramente y luego siguió con el tema de sus países natales- Es un lugar realmente hermoso, vale la pena el viaje largo pues tiene bellezas que no se encuentran en cualquier lugar del mundo -Sonrió con orgullo por su país y chocó suavemente su copa con la del otro antes de beber un sorbo relativamente largo de aquel dulce y delicioso brebaje-