Riña Casual (Ayachii & Ska)

-Cansada del trabajo, con su habitual aire de pocos amigos en su rostro cuando volvía a casa Scarlet tenía su bajo en su espalda, un cigarro en la boca y una melodía en la cabeza.

Estaba cabreada, ¿Como no estarlo? el día había sido una mierda!una gran pelea en el bar y ella de nuevo teniendo que meterse para solucionar las cosas. Trató de andar tranquila con el pensamiento de que pronto podría llegar a casa, tomar una ducha y relajarse.

Estaba en eso cuando vio un tumulto de gente agrupada en lo que era una pelea, nada del otro mundo. A medida que se acercaba la gente se seguía agrupando¿Tan buena estaba esa riña? Como curiosa gata callejera que era la bajista se adentró en el tumulto para ver aquella pelea. Lo sabía, aun cuando la mayoría de la gente en los barrios bajos la conocía porque hace años que vivía en ellos era de las pocas que se metería en una pelea que no era de ella a menos de que se viera que era injusta. Sí,...era una metiche en ese aspecto, pero al menos con eso había salvado a una que otra criatura pequeña, y a ella por lo mismo también la habían salvado, no se arrepentía. Más allá de eso, si no salían del camino no iba a poder ir a su casa, estaba cubriendo TODO el pasaje para que pudiese seguir avanzando.

Genial, lo que me faltaba-refunfuño-Como si una pelea no fuese suficiente.

Un hombre delgado de cabellos rojizos con una mirada afilada de color verde estaba junto con otro chico tatuado en su cara, nadie podía decirle que el ultimo no estaba ebrio por como se movía mientras que el otro parecía en todos sus sentidos.

Tsk, que ruidosos-de un momento Scarlet tuvo que abir más los ojos, los movimientos se vieron increíblemente rápidos, si no fuese por todos esos años no habría visto nada-Pero que mier...-la mano del pelirojo se había convertido en algo como un arma y sinceramente esta pelea ya no era para nada justa, aunque ¿quien era ella para juzgarlos?

Sonidos a lo lejos se escuchaban, alguien había llamado al parecer a la policía-Mierda!!Nos van a joder a todos!!

Se hizo paso y tomó por detrás desde el cuello de la camisa a Ayato, a simples ojos una delgada mujer como ella no podría hacerle frente a un hombre, pero era experimentada y con mucha fuerza, engañaba por como lucía por lo que no fue demasiado dificil separarlos a ambos viendo que ya prácticamente no estaban poniendo atención a su alrededor.

El cuerpo de Ayato se tambaleo al momento en que la bajista lo tiró hacía atrás, dejándolo caer al suelo con cierta brusquedad no necesariamente en una pose denigrante. Scarlet miró a ambos con el rostro furioso y de su boca salió ese acento casi callejero y masculino que usaba cada vez que peleaba-

Joder!!!acaso pueden ser más ruidosos!!!!-miró a Dante con un fuerte sangrado para luego dirigir su mirada a los ojos de Ayato, sin miedo alguno por la anterior expresión que tenía en su rostro en una postura totalmente aguerrida y fuerte que no tenía pinta de ceder ante nada ni nadie. Algunos cuchicheos se escuchaban entre la multitud. Levantó la mirada para dirigirla al tumulto-Acaso están sordos!! Viene la maldita policía!!váyanse todos!!!-miró a Dante, parecía que lo había visto más de alguna ocasión cerca de los bares o en la calle, al otro ni en pelea de perros.

La gente comenzó a moverse debido a la advertencia de la rubia, si dejaba a Dante allí era posible que se desangrara*Por qué demonios...ahaa!!!manía mia de querer ayudar a la gente en los barrios bajos MIERDA!!*

Volvió a mirar a Ayato-No sería muy inteligente de tu parte si te quedas aquí con este sujeto, si quieres la revancha sería mejor una pelea donde ambos estuvieran sobrios además de que la policía aquí no es muy agradable con los sujetos de los barrios bajos, les importa una mierda matar a alguien, aquí todos somos basura que es mejor aniquilar, les estarías haciendo un favor.-tomó a Dante del brazo y apoyó este en sus hombros-Aprieta la herida con la mano-era algo complicado, pero debía ayudarlo si no era posible que se desangrara y el lugar más cercano era su casa, no tenía de otra-Dejen esto para después, a menos de que quieras ponerte a pelear también conmigo, yo no tengo problemas-se rió un poco por lo bajo esperando que se moviera, las alarmas del carro de policía estaban demasiado cerca-

Retiró su mano de los interiores del contrario, impregnada de aquél olor tan peculiar...algo que parecía ser sangre animal. Tal vez había exagerado un poco pero vale, ¡ver así a ese ebrio arrogante era divertido! Un dejo de sadismo se evidenció en su rostro al escucharle gritar como cualquier miserable, una sonrisa pérfida que revelaba sus intenciones de matarle.

Arqueó una ceja ante los quejidos del tipo, como preguntándole: "¿Y quién es el marica ahora?" Sin hacer dimensión alguna de la diferencia de daño y magnitud de ambos golpes, sin sopesar las consecuencias que pronto se cernirían sobre él.

Ayato pasaba de él como si nada tuviera que ver con su estado actual, solo la curiosidad le permitió analizar su diestra de manera pausada, para luego darle una breve lamida.

Gesto de referencia:

Su expresión se desarmó en el instante después de esa probada. Volteó a ver al herido con las pupilas dilatadas, como recordando súbitamente los problemas y el pavor que le había ocasionado durante la pelea. Restó incrédulo, asimilando la consistencia de esa sangre tan particular con el filo de su lengua.

Antes de sacar conclusiones e ignorando por completo el barullo a su alrededor una mujer desconocida le apartó del herido, sirviéndose de aquél lapsus de distracción para lanzarlo duramente contra el piso. Ayato permaneció un instante en esa postura, sin salir de su sorpresa por aquella molesta interrupción. Se vio gradualmente inundado por una colérica emoción al escuchar su advertencia, pero tardó en volver a incorporarse pues su cuerpo le estaba saldando cuentas después del daño recibido.

- ¡NO ME DIGAS QUÉ HACER! - Soltó en un gruñido, un tanto salido de sí. Apenas se levantó se abalanzó brutalmente contra ella, dándole un fuerte empujón y conteniendo el creciente impulso de rajarle la cara de un zarpazo. Pero debía controlarse porque...mierda, tenía razón. - Tengo claro cómo funcionan las cosas aquí, estúpida... - dijo empleando un tono obstinado pero más graduado que antes, aunque le ofendía ser instruido en su propio territorio era consciente de que en cualquier momento se volvería a desplomar por lo molido que estaba.

La policía no tardó en llegar y la multitud que antes dibujaba el círculo entre los dos peleones se dispersó de un lado a otro, enardecida. La presencia de los uniformados solía provocar ese tipo de reacciones tan contrarias como coherentes: violencia y huida.

- Tsk...piérdanse... - masculló con fastidio antes de apresurarse a un callejón aledaño donde, ya sin testigos, se desvaneció en el aire esperando partir de forma definitiva cuando las cosas se hubieran tranquilizado.

Mi respiración se hizo breve y superficial ante el dolor, el agujero que me había dejado me ardía y bien, aunque estaba más preocupado de eso que del entorno, y aún algo ebrio, entendí la situación.

Una chica me había salvado el culo en ese momento al intervenir, por supuesto se lo agradecía más de lo que creía, y es que ese bruto orgullo de macho recio en mi no existia, si una hormiga me ayudaba, estaría igual de agradecido con ella.

"NGhh.." Me puse en cuatro, jadeando por la boca, a penas levanté la cabeza una oleada de nauseas me azotaron y no pude evitar vomitar, en parte, el líquido que hace no mucho me había embriagado y en parte sangre. ¿Era por los golpes o porque el muy imbecil había ido más profundo de lo que podía percibir?

Luego de limpiarme la boca con el dorso de mi manga traté de girar, pero solo pude mirar hacia atrás sobre mi hombro. Vi al sujeto huir a la chica ser empujada. Cosa que en estas tierras no era de extrañar. Guardé mi cuchilla de vuelta en el bototo con la mano que tenía libre, la otra presionaba con fuerza bruta mi abdomen.

"Hey dear..." Mi voz sonó mas terrible de lo que en verdad me sentía.

"Corre también si no quieres que te atrapen."

Advertí cambiando mi postura, para quedar sentado sobre mis rodillas, de esta forma podía ver como la poli se acercaba y también podía volverme un ovillo cuando la punzada de mi estómago era insoportable. Mi respiración cada vez parecía más forzada, pero no era tanto por el golpe, de alguna forma, esa pelea me había despertado unas asquerosas ganas de descuartizar a ese sujeto, aunque eso me significara salir medio descuartizado también.

Levantó la ceja por el fuerte grito más no se dejó amedrentar por tal voz masculina, Scarlet sentía el peligro en esa mirada sobre ella, la mirada casi de un cazador que hubiese podido matarla si lo deseaba, más no lo hizo, la empujo haciéndola retroceder para luego dar paso a la huida.

Puto imbécil...-dijo siseando, conocía hombres que eran mucho más aguerridamente estúpidos que se hubiesen quedado a pelear con ella, algo totalmente imbécil pero demostraba que no dejaban las cosas a medias y para ella eso era más respetable, pero ¿que mierda le importaba a ese sujeto ser respetado? Nada, eso era obvio.

Se giró hacia el chico tatuado, se veía en un estado deplorable. Scarlet solo suspiro- No te voy a dejar aquí, si lo hago vas a morir y tienes que patearle el culo a ese sujeto cuando lo vuelvas a ver...tsk- A Scarlet no le hacía gracia el chico de cabellos rojos, desprendía esa presencia que solo causaba caos en donde estuviera y en su barrio si bien habían sujetos realmente peligrosos cada cual sabía los limites, el al parecer pensaba que no los tenía.

Apóyate en mi, no hay mucho tiempo-se arrodilló para que Dante se apoyase en ella como le decía- Va a doler pero el hospital está demasiado lejos y es la única forma de intentar sobrevivir, ¿confiaras en mi?

"¿Morir? Haha"

Me reí sin mucha gana, y es que si bien es cierto esta puta mierda me dolía, despues de todo la perra de ojitos verdes me metió los dedos, literalmente, no era una de las heridas mas feas que había tenido. No iba a morir, eso podía darlo por seguro, pero me agradaba la forma en que ella me apoyaba. Tal vez, era la primera vez que algo así me pasaba en esta ciudad, y de alguna forma, me trajo un poco de nostalgia.

"Vale, te deberé una grande eh... Luego me cobras lo que quieras en carne, en dinero pagan los politicos."

No era como si no tuviera dinero, de hecho, si la tia me lo pedía, se lo daría, pero en los barrios bajos hay otras cosas más importantes que un fajo de papel.

"Bah, de a ratos también me da lo masoquista." Dije intentando bromear, apoyándome en ella para levantarme, viendo burros verdes al ergir el cuerpo. Al menos mi contextura no era grande, por lo que no le dificultaba tanto el cargar con parte de mi peso.

"Claro que confío! tendrías que ser muy perra para dañar a alguien ya herido." Le di una sonrisa cómplice y asentí con la cabeza. "Vale, a tu guarida para un vendaje rápido. Luego tendré que ir al hospital igual, de los puntos no me salvo."

soltó una carcajada seca por las palabras del pelinegro- Con esas palabras estoy más que segura que confias en tu superviviencia!!-miró hacia el frente y sonrió segura, con ojos decisivos- Se nota que eres de aquí...que sabes de la calle.

Aseguró a Dante y se adentró en la oscuridad del callejón, escucho las bocinas de los policias acercarse, las luces tras ellos, pero por suerte y un pelo pudieron entretejer su escape. Unos cuantos pasos más por ese callejón y se encontraron con un lugar rodeado de casas y algunos edificios viejos y de un gris sucios, de colores algunos oscuros y otros claros, entre casas y casas(parecía una comunidad) llegaba la luz de la luna y unas cuantas luces artificiales de las casas, se podía sentir la mirada penetrante de entre algunas ventanas cubiertas de cortinas viejas, más al presenciar la figura conocida de Scarlet dejaron de asediar.

algo así(?):

Aquí es- frente a una de las puertas, quizás algo mejor cuidada que otras del mismo sector, se detuvieron. Scarlet sacó las llaves de su bolsillo aun sosteniendo a Dante y abrió la puerta, luego un candado- listo.

Con la ayuda de su pie, empujó la puerta, se podía ver un pasillo algo estrecho, entró con él de lado, se aseguró de que nadie los seguía y cerró la puerta para posteriormente encender las luces. Llegaron no más de 5 pasos a otra puerta, la abrió y llegaron a la sala de estar.

no encontré exactamente lo que quería pero bue XD:

Poco le importó a Scarlet si manchaba el sofá con sangre, sentó a Dante en el más grande- Espera aquí, iré por el botiquín y lo demás.
Lo dejó allí, a su bajó puesto sobre el otro sofa de forma segura, se sacó su chaqueta y habló en voz alta para ir al baño donde tenía el botiquín-Hey!!no te vayas a desmayar ni nada!!así que anda hablándome al menos de que coño iba esa pelea jajaja

En silencio y tratando de dar pasos suaves al caminar, me dejé guiar por ella, obviamente atento al camino y a donde nos dirigíamos, la verdad es que no estabamos muy lejos de mi casa, lo cual, fuera de todo, me hizo un poco de gracia. Por poco eramos vecinos, pero no dije nada.

Al entrar noté de inmediato que la chica o vivía sola, o era lesbiana (?), haha, no sé, intuiciones de mi nariz y es que solo sentía su presencia ahí dentro, y solo su aroma.

"O--ouch!"

Dejé escapar cuando me senté en el sofá, aun con una de mis manos tapando los hoyitos que mi amigo me hizo. Solo cuando ella dejó el lugar para ir por el botiquien fue que retiré la mano y examiné la herida. Tenía la camisa algo pegoteada por lo que la desabroché.

"No moriré mujer! Y si me desmayo, me recoges! hahaha-- Ekkk..!" Me volví a quejar y es que al reír mi malestar era un poco más doloroso. "De qué iba? pues... yo creo que de aburridos, pero no esperaba que el tipo fuera tan enserio." Mientras tanto me toquetié la herida con el cuidado respectivo. Era un poco más profunda de lo que había creído y la verdad, aún seguía sangrando. Solo esperaba que el muy cabrón no me hubiese sacado un pedazo porque ahí si que sería un dolor de culo la recuperación. Nah, pero parecía que al menos con los puntos no habría problemas.

"Aunque creo que yo también me emocioné un poco..." Miré a otro lado con un poco de culpa, sabía que me había dejado llevar, era cosa de ver el rastro de sangre en mi cuchilla, la que en ese momento saqué. Al menos el puto no se las había llevado gratis. Acerqué la cuchilla a mi nariz, y olfatié el rastro de sangre.... Como suponía.... olía diferente a la de otras personas...

Qué putas pasa en esta ciudad....?

Suspiré y guardé el arma de vuelta en mi bototo y entonces llevé a la cabeza hacia atrás, cerrando los ojos un momento. Podría ser que estuviera cansado? o era que el efecto del alcohol aún hacía lo suyo en mi cuerpo?

Ok, ok entiendo jajaja, pero ni se te ocurra caerte mira que limpiar es un cacho!!-había encontrado el botiquín, lo dejó sobre un pequeño mueble y lavó sus manos con jabón cuidadosamente, sabía que era importante este tipo de procedimientos ya los había visto millones de veces, sobre todo cuando Michael y los demás se metían en riñas...o inclusive ella.

Llevó el botiquín y se encontró con el chico con los ojos cerrados.

*Por alguna extraña razón me recuerda a alguien abandonado...*trató de no pensar mucho en ello y se acercó a él, se arrodilló para ver la herida.

Aburridos eh~ hay formas más ocurrentes de divertirse dear, aunque al parecer ya venías de divertirte ¿o no?-se rió con un poco de preocupación aunque no podría decir nada si ella antes hacia lo mismo.

Sangra más de lo que pensé...primero hay que lavarla-volvió a pararse y sin demorar mucho trajo un balde pequeño con agua y un paño limpio para lavarla-déjame quitarte la camisa...-comenzó a ayudarle con ello- Por cierto-sonrió de forma más femenina- soy Scarlet, Scarlet Lockhart, puedes llamarme Scar, tú nombre dear?- trataba de seguir la conversación para que se hiciera mas normal el proceso.

"Mhhh. Algo así. Por alguna razón supongo que el alcohol no me fue suficiente." Le expliqué notando que mi cuerpo estaba mucho más lucido que antes y al parecer, mi estado actual sí se debía, en parte, al cansancio.

Asentí al hecho de que estaba sangrando más de lo esperado y con ello le dediqué una mueca a modo de disculpas por todo el webeo.

"Adelante dear, quitame lo que quieras~" Dije con mi humor doble sentidista de siempre, y es que vamos, la chica tenía su estilo, y eso para mi siempre era atractivo, sin mencionar que de primeras instancias creo que nos habiamos llevado bien. Bueno sí, yo siempre anteponiendo la cama ante todo~ Heh.

"Scarlet eh! So, que tal Ska?"

Dije parpadeando como si estuviera proponiendo la gran idea del siglo, y bien sabía que era una estupidez, pero ya era mi sello personal esto de buscarle sobrenombre a todo aquel que se me cruzara en el camino. Y es que así era más fácil recordarlos. A demás me sonaba algo mucho más familiar. Skarlet suena a un nombre o muy ardiente, o muy frio. Bah, seguro y son cuentos mios.

"Dante, Danchii para los amigos." Esta vez no supuse necesario agregar mi apellido, que en verdad, no era ni mio. Dante es quién soy ahora, nada más y nada menos que un idiota sin mucho que hacer por la vida, al que ahora habían agradido y el que por tener mucha raja, ahora una chica bonita le estaba curando como cualquier imbecil de las calles desearía.

Mientras ella hacía lo suyo, mi mirada estaba fija en ella, de a ratos en su cara, en sus manos, si bueno, en sus pechos y luego de nuevo en su cara. El roce de sus manos, me daba algo de cosquillas. Era raro.

Te diría el alcohol nunca es suficiente pero sería una cara dura si dijera eso jajaja- Lo sería en proporciones gigantes.

No me provoques o terminas desnudo~ y en tu estado ahora no es conveniente, me gusta moverme mucho jajaa-le quitó la camisa dejándola a un lado, observando el torso del hombre posó su mano sobre su pecho y le sonrió- Ska?hey, suena bien! está muy bien, suena mucho mejor que Scar-

*Suena mucho mejor que ese apodo de hace tiempo...mucho mejor!*

Entonces puedo llamarte Danchi?Aunque recién te conozco siento que te he visto mucho por aquí, eres guapo y simpático, así que no me molestaría ser tu "amiga"-lo último lo dijo de forma coqueta y bromista, jugueteando con sus largas pestañas y sus gestos felinos al mirarle unos momentos. 

Estaba ya terminando su trabajo, la herida ahora estaba mucho más limpia, tomó un trozo de tela limpia apretando la herida para detener el sangrado, si no pasaban menos de 5 minutos y la sangre no dejaba de salir demasiado empezaría a preocuparse-

Una persona normal estaría aterrada con estas cosas, al parecer estás acostumbrado a las riñas...-No iba a preguntar porque era, no tenía derecho a meterse en su vida-Aunque te entiendo, muchas veces ayuda un poco de golpes para despejar la mente.

Mantén eso ahí si?-le tomó la mano a Dante para que el mismo apretara y detuviera el sangrado, ella por su parte fue a dejar el balde al baño cercano-
 Sabes sería bueno que llamara a alguien para llevarte a que te suturen, alguno de los chicos del bar no tendría problema en llevarte si se lo pido-

Se deshizo de las cosas en el baño y volvió para revisar la herida, luego de unos minutos transcurridos al menos parecía dejar de sangrar, poner un parche y luego ir a urgencias sería la mejor opción-Uno más y estaremos bien.

Retiró la tela he hizo la curación respectiva, ahora las vendas hacían lo suyo.-si que tuviste suerte...seguro sabes, aquí en los barrios bajos es muy raro que te ayuden...

"Oh c'mon, yo no lanzo piedras y escondo las manos~ si quieres abusar de un herido, adelante, eres bienvenida."

Guiñé el ojo, pero no estaba bromeando, por mí que importaba si se me iba medio litro de sangre entre treque y treque, pero ya, entendía que tampoco era algo para tomarse tan a la ligera. ¿Tal vez a la próxima? Luego reí junto a ella tras la aprobación de su nuevo nombre, o al menos, el pseudonimo bajo el cual yo le llamaría.

"Claro, Danchii para ti, me salvaste el culo hoy, eso ya te hace poder llamarme como te plante la gana dear. Y yo digo que podemos ser más que "amigos" "

Mi sonrisa fue más insinuante, pero esa atmosfera de coqueteo era básicamente su culpa. Sí, mi vista no dejaba pasar los gestos que ella hacía, como se movía, era un tipo de mujer que uno no encontraba todos los días.

"Tsk.." Dejé escapar en el momento en que ella llevó mi mano a la herida, pero le hice caso y afirmé el trapo. "Pues me gusta pelear. No tanto como bailar y tener sexo, pero algo es algo." Me encogí de hombros, sabía que ella me entendía, a final de cuentas estabamos metidos en el mismo saco. Mi expresión simpática y de buen humor se fue a la cresta en el momento en que ella sugirió llamar a un tercero.

"Joder, no... Solo dame algo para el dolor y yo mismo voy a que me corcheteen, me sentiría mal molestando en exceso por un rasguño."

Hice una mueca de molestia ante la idea, pero luego le volví a sonreír a ella, después de todo, era mi angelito de la guarda aquella noche.

"I know, tengo mucha suerte por haberme topado con alguien amable, encima simpática y encima con un lindo cuerpo y rostro. Lucky~! Pero hey, eso te convierte en un especimen raro." La apunté con el dedo, casi tocandole la nariz. "¿Tienes hermanos?" Pregunté curioso, y es que por algún motivo su modo de actuar, entre protector y permisivo me recordaba al típico caracter que tienen las hermanas mayores en nuestros barrios.

Parecía del tipo de chico que se cuidaba solo, tenía toda la pinta, sobre todo cuando vio que su rostro se llenaba de molestia al solo decir algo de un tercero, Scarlet sonrió con complacencia, ella entendía...después de todo muchas veces había hecho lo mismo en el bar antiguo junto con los demás y Michael- Esta bien, confiaré en que estarás bien, además, no me fijaría en un hombre que no puede volver a darme las gracias~-le sonrió de forma un poco más dulce sin dejar de ser coqueta y al recibir tantos halagos del pelinegro rió divertida, abrió los ojos un poco mirando el dedo indicador casi sobre su nariz, cerrando los ojos al escuchar su pregunta-

No los tengo, soy hija única-miró las vendas con cuidado intentando no mirarle a los ojos- Digamos que solía cuidar mucho a tipos que tenían la manía de meterse en problemas como tú-su sonrisa se volvió algo madura y casi fraterna, levantó la mirada y dejó su ceño fruncido, picó la frente de Dante un poco usando un tono de voz casi de hermana mayor- demonios, siempre termino cuidando a tipos como ustedes, son un dolor de cabeza- después de unos segundos volvió a sonreír- Pero no puedo decir nada, yo en su momento era exactamente igual, seguro que lo entiendes ¿no? tienes esos ojos...los de la calle-se levantó y sentó a su lado, cruzando las piernas- solo los que hemos vivido en ella y hemos recibido ayuda en un mal momento podríamos ayudar a alguien cuando está así, después de todo nadie gastaría su tiempo en personas que tienen marcada la calle en su mirada..."déjenlos, ellos solos se metieron en eso" y~~ cosas como esas...-sus blondos cabellos se deslizaron hacia atrás mientras que su felina mirada se clavaba en la de él- pero no hay que tomar en cuenta a esos bastardos-rió mostrando los dientes, la cadena de su labio se movió un poco- además, ya sabes, los callejeros tenemos ese sex appeal nato o no~ es imposible obviarlo jajaja

No muchos entraban en la casa de Scarlet, Dante le recordaba a sus antiguos días, los días llenos de barro, sudor y sangre, el aroma a tabaco y las risas combinadas con golpes varios, inclusive el tatuaje de su rostro le parecía algo agradable, debía tener su historia...- Tú tienes hermanos Danchi?

"Ten por seguro que volveré dear. Y te invitaré a beber o algo así. Es lo minimo."

Y bueno, sí, si aunque no lo crean aquí en los barrios bajos también tenemos modales. Un poco distintos, pero hay. Escuché su explicación y en verdad me sorprendió haberme equivocado con lo de los hermanos, pero a medida que contaba su experiencia, pues se entendía entonces el por qué era como era.

"Hablas como una vieja Ska! Hahaha."

Reí de buena gana mientras la dejaba continuar. No iba a negar mi vida entera en las calles, sabía bien que la gente que lo pasaba igual tenía ese sexto sentido para percibirlo en la mirada ajena y sí, hay que decirlo, somos más cools~ Y que me digan lo contrario. Esta chica era una clara prueba de ello.

"well yeah, somos una mezcla perfecta de lo salvaje y la amabilidad. ¿no?"

Sonreí complacido de las palabras, pero más que eso, me sentía complice dentro de un mismo pecado o algo así, aunque no hay que decir que culpa de nuestras vidas, ninguno tenía.

"Not, not rlly. Nunca tuve hermanos, pero puedo decir que algo similar a lo tuyo me pasó. Solía tener una banda, tu sabes, tipo pandilla. Nos cuidabamos los culos mutuamente, si alguien se metia con uno, cagaba a manos del resto. Era simple."

Alcé la vista un momento. ¿Porque me ponía a hablar como si nada de algo que realmente no me gusta recordar, porque suelo ponerme un poco marica, con una chica que a penas y conocía? Supongo que me sentía cómodo ahí, con ella.

"Fueron buenos tiempos. Oh! Pero bueno, ahora estoy aquí en esta ciudad, ellos se quedaron muy atrás asi que se podría decir que ahora soy un pobre cucho abandonado~" Bromié y volví la vista hacia ella. "Pero quien sabe si encontré a una onee-chan~" Le saqué la lengua, no tanto en burla, sino a modo de gracia para ambos.

"Me gusta tu estilo." Admití mientras mi mano a penas y rozaba su labio, volviendo a mover la cadena que lo adornaba. "Eso es sexy." Señalé como si la acusara.

oye!! decirle de esa forma a una mujer es una falta de respeto, puto!!-le empujó un poco duro en el hombro sin darse cuenta y rió entre dientes- oh, sorry, mala idea jajaja.
Aunque no sé que tanto reclamo si me han faltado más el respeto de otras formas que de está jajajaja.


-reía junto a él o sonreía de vez en cuando, estaba agradeciendo meterse en esa pelea aunque hubiese quizás también salido herida, por suerte no fue el caso y ahora solo se dedicaba a cuidar a Dante.

Escucho su historia, la comprendía, porque como el decía era algo parecido. Michael, ella y los demás siempre se cuidaban unos a otros, cada día, y más aun cuando era pequeña he inmadura, terca he irresponsable, cuando le daban sus crisis de abstinencia, los chicos siempre la cuidaban.

Pudo sentir un poco de nostalgia entre ambos, quizás era porque de una u otra forma sabía que seguramente Dante en este aspecto era igual que ella, no solía compartir su pasado con nadie- Así que solo...estamos en el mismo barco entonces, yo también dejé atrás a los chicos-decir el porqué...quizás en otra ocasión, ahora no era necesario y no quería dar la lata, además de que no quería forzar a Dante tampoco a decir algo que no quisiera solo porque ella contaba su pasado.

Sonrió con complicidad besando los dedos que solo se posaban fugazmente sus labios, en un juego de confianza y a la vez el mismo que cada uno sabía que cumplía, ese instinto atrayente- Pues déjame ser tu one-chan~ Danchi, cuidaré muy...muyyy bien de ti-entrecerro los ojos y ladeo el rostro, levantando ligeramente el hombro hacia donde se ladeaba su cabeza.- No estaría bien si no fuera igual de sexy que mi querido hermanito, no es así?-se levantó un momento, tomando el rostro de Dante y besó un momento los labios del azabache, casi como un pacto incestuoso, jugando un poco con él y su lengua. Se separó luego de un rato y habló sobre sus labios- Asegúrate de volver sano y salvo, ya sabes donde trabajo, podemos vernos y seguir esto, ahora debes estar en optimas condiciones si no quieres preocupar a tu querida ne-chan~ my little brother-un beso fugaz con una pequeña mordida y Scarlet se separó de él guiñándole un ojo- El sangrado al parecer a parado, es mejor que vayas al hospital ahora, ¿Realmente no quieres que te acompañe?

"Oh eso no esta bien~ A demás dije que hablabas como una, no que lo eras"

Alcé las cejas de forma repetida imitando a miguel. Poniendole algo más de humor, pero me duró poco porque el empujoncito me sacó un quejido que retuve pero no logre discimular. Agradecí que ella mencionara que eramos mas o menos de los mismos, no dudaba que en mas de algo nuestro pasado podía coincidir, pero ahora no era el momento.

"Ya veo~"

Asentí y con eso dejamos pasar el tema. Lo bueno era que tal vez por ser quienes éramos nuestra intuición era como parte de nuestra piel. No eran necesarias las palabras inecesarias. Entendiamos nuestro propio lenguaje.

"Mhhhh me lo pensaré~"

Bromié y que va, no tenía que pensarlo dos veces. Cualquier imbécil de mis tierras hubiese matado con tal de tener una hermana así, y vaya que era una suerte.

"¿Ehh~? ¿Estás insinuando que soy sexy?" Murmuré con la voz ronca y melosa que no todo el mundo tiene el agrado de oír saliendo de mis labios. Casi como un ronroneo de un animal salvaje que solo fue interrumpido por un, LO ADMITO, inesperado beso con sabor a incesto sobre mis labios. Y joder qué gusto más agradable el que dejó el cosquillejo de la cadena sobre mi barbilla.

"Tsk, hey, sabes que a eso le llaman calentar la sopa y no beberla?" Ladeé la cabeza pero de inmediato me devolvió el vuelto. "Vale, vale-nh..." Suspiré poniendome de pie con solo un poco de molestia.

"Nah, que no es necesario. Si me acompañas no iré por los puntos y terminaremos desiviando camino a un motel. Creeme que la idea de eso me es más tentadora."

Sonreí lascivo mientras arreglaba mis ropas, pero era honesto, era mejor que me fuera por mi cuenta esta vez. "Pero la invitación te la cobraré a penas me pueda mover Ska." Mi mirada delató mi lado más animal. No era una advertencia o amenaza, era una clase de pacto.

"¿Hay algo particular que te guste? Después de todo te estaré debiendo una."

Rodeé sus hombros con mi brazo y la obligué a avanzar conmigo la pequeña distancia hasta la puerta, quería que me despidiera.