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Un pez nocturno (Mine)
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Re: Un pez nocturno (Mine)
Las vagas suposiciones de Mine resultaron certeras, pero no pudo prever el desconcierto que eso le significó. Por un breve instante, que para la muchacha fue eterno, le envidió profundamente. Su libertad, su resplandor... Todo aquello que le habían arrebatado al nacer en la familia Sagan.
Con calma se puso de pie, apartando el cuaderno de dibujos y el pequeño estuche de su falda, y se dirigió con expresión taciturna hacia su modelo. Era una mujer muy desequilibrada, pese a sus buenas maneras.
– ¿Qué clase de estrella los une para que no puedas brillar por tu cuenta? – Preguntó, dejando de lado los formalismos y cortando las distancias entre su mandíbula y el rostro ajeno. – Quisiera saberlo... – susurró, cautivada por el misterio que envolvía a Yuli y aún algo trastornada por recordarse así misma como una fracasada.
Sus manos se deslizaron hacia él, rozando su cuello y acariciando las hebras de fino cabello azulino. Una suave caricia indiscreta.
Las arregladas uñas de Mine analizaron el rostro del muchacho, delineando sus facciones con la yema de los dedos. Acariciando su mentón con pronunciada delicadeza. Detuvo su análisis en los labios. Curiosa, se encargó de abrirlos ligeramente con el pulgar, y tocar los colmillos que Yuli se esforzaba por ocultar. Estos le hirieron levemente el dedo... Sangre que goteó en los labios del ajeno.
Con calma se puso de pie, apartando el cuaderno de dibujos y el pequeño estuche de su falda, y se dirigió con expresión taciturna hacia su modelo. Era una mujer muy desequilibrada, pese a sus buenas maneras.
– ¿Qué clase de estrella los une para que no puedas brillar por tu cuenta? – Preguntó, dejando de lado los formalismos y cortando las distancias entre su mandíbula y el rostro ajeno. – Quisiera saberlo... – susurró, cautivada por el misterio que envolvía a Yuli y aún algo trastornada por recordarse así misma como una fracasada.
Sus manos se deslizaron hacia él, rozando su cuello y acariciando las hebras de fino cabello azulino. Una suave caricia indiscreta.
Las arregladas uñas de Mine analizaron el rostro del muchacho, delineando sus facciones con la yema de los dedos. Acariciando su mentón con pronunciada delicadeza. Detuvo su análisis en los labios. Curiosa, se encargó de abrirlos ligeramente con el pulgar, y tocar los colmillos que Yuli se esforzaba por ocultar. Estos le hirieron levemente el dedo... Sangre que goteó en los labios del ajeno.
Mine Sagan- Ocupación : Músico
Mensajes : 1143
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Re: Un pez nocturno (Mine)
Cuando la vi dejar sus pertenencias a un lado con un aura diferente a su alrededor he de confesar que me asusté. Sabía que se acercaría a mí y no estaba seguro de como terminaría eso. A medida que más cerca estaba yo intentaba huir de na forma sutil. Di un paso hacia atrás pero solo me topé con el gran vidrio que contenía a los peces. En un abrir y cerrar de ojos ella tocó mi piel, y temí incluso más. Mi piel es fría la mayor parte del tiempo, solo cuando me alimento logro contener algo de temperatura que se desvanece con las horas.
"-S-seguramente es... solo un vínculo sentimental... empatía... N-no estoy seguro señorita Sagan...-" Respondía tartamudeando por los nervios, no era tan tonto como para no darme cuenta de que ella no solo sospechaba algo, sino más bien estaba segura de sus suposiciones y tan solo buscaba como comprobarlas.
Sus caricias me produjeron un escalofrío, no por temerle a ella, sino por la intensidad de su mirada, por sus dedos suaves a los que no estaba acostumbrado, si a finales de cuenta los únicos que permitía que me tocaran eran Ash y Smile, y la mayoría del tiempo cuando me tomaban por sorpresa o cuando la situación lo ameritaba, no más que eso.
Ella separó mis labios y mi cuerpo se tensó al sentir el tacto en mis colmillos. Al instante noté un aroma familiar inundando mi nariz y un sabor suave sobre mi boca. Sangre.
Mis mirada se agudizó y mi expresión pasó de incomodidad a cierta agresividad. No estaba acostumbrado a forzar mi autocontrol.
Le di un suave empujón por los hombros, sin llegar a ser grosero y la aparté de mi, incluso girando la cabeza para evitar el contacto entre nuestros ojos.
"-¿S-se ha lastimado el dedo?... ¿Está usted bien?-" Mi respiración se había acelerado lo suficiente y todo mi cuerpo guardaba tensión, mis ojos brillaban diferentes por ello no quería levantar la mirada. "-Debe cuidar sus manos, por su arte...-" Susurré un poco mareado por mis propios instintos.
"-S-seguramente es... solo un vínculo sentimental... empatía... N-no estoy seguro señorita Sagan...-" Respondía tartamudeando por los nervios, no era tan tonto como para no darme cuenta de que ella no solo sospechaba algo, sino más bien estaba segura de sus suposiciones y tan solo buscaba como comprobarlas.
Sus caricias me produjeron un escalofrío, no por temerle a ella, sino por la intensidad de su mirada, por sus dedos suaves a los que no estaba acostumbrado, si a finales de cuenta los únicos que permitía que me tocaran eran Ash y Smile, y la mayoría del tiempo cuando me tomaban por sorpresa o cuando la situación lo ameritaba, no más que eso.
Ella separó mis labios y mi cuerpo se tensó al sentir el tacto en mis colmillos. Al instante noté un aroma familiar inundando mi nariz y un sabor suave sobre mi boca. Sangre.
Mis mirada se agudizó y mi expresión pasó de incomodidad a cierta agresividad. No estaba acostumbrado a forzar mi autocontrol.
Le di un suave empujón por los hombros, sin llegar a ser grosero y la aparté de mi, incluso girando la cabeza para evitar el contacto entre nuestros ojos.
"-¿S-se ha lastimado el dedo?... ¿Está usted bien?-" Mi respiración se había acelerado lo suficiente y todo mi cuerpo guardaba tensión, mis ojos brillaban diferentes por ello no quería levantar la mirada. "-Debe cuidar sus manos, por su arte...-" Susurré un poco mareado por mis propios instintos.
Yuli- Ocupación : Vocalista
Mensajes : 421
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Edad : 29
Re: Un pez nocturno (Mine)
Sintió las manos de Yuli sujetando sus hombros, apartándole con delicadeza. Las facciones de Mine no demostraron atisbo de preocupación o desconcierto, muy por el contrario, presentó una expresión interesada y atenta. Aquél era otro gran descubrimiento. En su mente aún divagaba la posibilidad de que él en realidad no fuese un ser humano, sino una especie de errante demonio, pero la lógica le impedía aceptar algo así tan fácilmente.
Solo había querido gastarle una broma, conseguir un beso sin permiso, quizás. Solo para desbaratarlo un poco. Mas el resultado no había sido tal. O mejor dicho, había sido mucho más intrigante de lo que ella hubiese imaginado.
– Procuraré tener más cuidado la próxima vez que me encamine a cortar una rosa... – murmuró con voz aterciopelada, sin despegar la mirada de los colmillos que acababan de dañar la superficie de su dedo. Una verdadera trampa espinosa.
Volvió la vista hacia su mano lastimada, sonriendo al escuchar las preguntas llenas de inquietud. – Aún si me quebrase los dedos en un acto desesperado por escapar, la maldición seguiría allí y sanarían rápidamente. Esto no es nada. – Dijo entonces, volviéndose hacia la banca en un elegante movimiento.
Sin emitir más juicios, guardó su cuaderno y su estuche en un bolso compacto que traía consigo, dejándose atrapar por el silencio que se había colado entre ambos. Se disponía a marcharse, pero antes de eso volvió a clavar la vista en su modelo.
– Quisiera escucharlo cantar al menos una vez – comentó, esbozando una expresión algo extraña. – Pero creo que no es posible, ¿verdad? Gracias por su ayuda, joven Yuli.
Solo había querido gastarle una broma, conseguir un beso sin permiso, quizás. Solo para desbaratarlo un poco. Mas el resultado no había sido tal. O mejor dicho, había sido mucho más intrigante de lo que ella hubiese imaginado.
– Procuraré tener más cuidado la próxima vez que me encamine a cortar una rosa... – murmuró con voz aterciopelada, sin despegar la mirada de los colmillos que acababan de dañar la superficie de su dedo. Una verdadera trampa espinosa.
Volvió la vista hacia su mano lastimada, sonriendo al escuchar las preguntas llenas de inquietud. – Aún si me quebrase los dedos en un acto desesperado por escapar, la maldición seguiría allí y sanarían rápidamente. Esto no es nada. – Dijo entonces, volviéndose hacia la banca en un elegante movimiento.
Sin emitir más juicios, guardó su cuaderno y su estuche en un bolso compacto que traía consigo, dejándose atrapar por el silencio que se había colado entre ambos. Se disponía a marcharse, pero antes de eso volvió a clavar la vista en su modelo.
– Quisiera escucharlo cantar al menos una vez – comentó, esbozando una expresión algo extraña. – Pero creo que no es posible, ¿verdad? Gracias por su ayuda, joven Yuli.
Mine Sagan- Ocupación : Músico
Mensajes : 1143
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Re: Un pez nocturno (Mine)
"-Pienso que quizas es demasiado bondadoso compararme con una rosa...-" Susurré en respuesta, mas no estaba seguro de que ella hubiese escuchado mi voz. Una flor pese a sus espinas no es más que un ente bello y puro, crece con ellas para defenderse, tonto es aquel que intenta cortarla y en el proceso termina herido, en cambio yo.. Estoy lejos de aquello. dificilmente mi daño podría tomarse como defensa propia, necesito la sangre de los seres vivos para existir.
Me llamó la atención sus palabras. "La maldición" a la que se refería sonaba como a la que yo mantengo en mi piel. Incluso si intentaran herirme de gravedad, no conseguirían mi muerte, dado que yo ya estoy muerto. Mi piel sana rápido y llega a ser escalofriante ver el proceso acelerado de cicatrización, si es que así puede llamarsele, ya que tampoco quedan marcas, huellas ni nada sobre mi piel de mármol.
La vi dispuesta a marcharse y sentí un poco de tristeza, pues tampoco había podido ver el boceto que ella había hecho.
"-Podrá, seguramente podrá hacerlo. Aún no es el momento, eso es todo. Me encargaré de enviarle una invitación alguna vez para que pueda oírme. A cambio me gustaría volver a posar para usted en el futuro.-" Le pedí suavemente, añadiendo luego una disculpa.
"-Lamento si la terminé incomodando, no estoy acostumbrado al tacto de las personas, lo lamento.-" Incliné mi cabeza a modo de disculpas y haciendo uso de mis cualidades sobrenaturales, huí del lugar con una rapidez que facilmente sería confundida con una "desaparición".
Estaba shockeado, aún sorprendido y confundido por aquella experiencia. Me refugié en la oscuridad hasta que la noche reinó.
Me llamó la atención sus palabras. "La maldición" a la que se refería sonaba como a la que yo mantengo en mi piel. Incluso si intentaran herirme de gravedad, no conseguirían mi muerte, dado que yo ya estoy muerto. Mi piel sana rápido y llega a ser escalofriante ver el proceso acelerado de cicatrización, si es que así puede llamarsele, ya que tampoco quedan marcas, huellas ni nada sobre mi piel de mármol.
La vi dispuesta a marcharse y sentí un poco de tristeza, pues tampoco había podido ver el boceto que ella había hecho.
"-Podrá, seguramente podrá hacerlo. Aún no es el momento, eso es todo. Me encargaré de enviarle una invitación alguna vez para que pueda oírme. A cambio me gustaría volver a posar para usted en el futuro.-" Le pedí suavemente, añadiendo luego una disculpa.
"-Lamento si la terminé incomodando, no estoy acostumbrado al tacto de las personas, lo lamento.-" Incliné mi cabeza a modo de disculpas y haciendo uso de mis cualidades sobrenaturales, huí del lugar con una rapidez que facilmente sería confundida con una "desaparición".
Estaba shockeado, aún sorprendido y confundido por aquella experiencia. Me refugié en la oscuridad hasta que la noche reinó.
Yuli- Ocupación : Vocalista
Mensajes : 421
Fecha de inscripción : 30/04/2012
Edad : 29
Re: Un pez nocturno (Mine)
Encaminaba sus pasos a la salida del recinto.
Nada más se alejó un poco cuando escuchó la voz de Yuli hablándole a una distancia significativa. La atmósfera difería completamente de la sostenida en la conversación previa, en la cual, a pesar de no conocerle en lo absoluto, sentía la misma pasión y comodidad de haberse reencontrado con un viejo amigo.
Pero ya estaba. El encantamiento se había roto.
Sin embargo, Mine no gesticuló expresión alguna. Le escuchó expectante, sin siquiera voltearse a verle. Tampoco mostró atisbo de querer responder a sus aseveraciones. Solo dejó escapar un suave suspiro cuando la presencia de Yuli desapareció. Sus ojos pasearon por el acuario, deleitándose nuevamente con la danza de los cardúmenes.
No era capaz de explicarse así misma aquél encuentro; sus pensamientos se redujeron al hecho de que el muchacho en cuestión, al igual que su hermano, vivía el sueño que a ella tanto le competía. Tal había sido su consternación que había decidido romper la barrera del respeto que sostenía entre ambos, al punto de indagar en su más fantasiosa sospecha.
Mine sonrió para sí. No cabía duda de que aquella sería una gran obra de arte.
– Estaré esperando. – Susurraron sus labios en la oscuridad, mientras su delicada figura se perdía en la penumbra, pensando qué clase de cuadro haría con aquél pobre boceto. Con aquél fascinante recuerdo.
Nada más se alejó un poco cuando escuchó la voz de Yuli hablándole a una distancia significativa. La atmósfera difería completamente de la sostenida en la conversación previa, en la cual, a pesar de no conocerle en lo absoluto, sentía la misma pasión y comodidad de haberse reencontrado con un viejo amigo.
Pero ya estaba. El encantamiento se había roto.
Sin embargo, Mine no gesticuló expresión alguna. Le escuchó expectante, sin siquiera voltearse a verle. Tampoco mostró atisbo de querer responder a sus aseveraciones. Solo dejó escapar un suave suspiro cuando la presencia de Yuli desapareció. Sus ojos pasearon por el acuario, deleitándose nuevamente con la danza de los cardúmenes.
No era capaz de explicarse así misma aquél encuentro; sus pensamientos se redujeron al hecho de que el muchacho en cuestión, al igual que su hermano, vivía el sueño que a ella tanto le competía. Tal había sido su consternación que había decidido romper la barrera del respeto que sostenía entre ambos, al punto de indagar en su más fantasiosa sospecha.
Mine sonrió para sí. No cabía duda de que aquella sería una gran obra de arte.
– Estaré esperando. – Susurraron sus labios en la oscuridad, mientras su delicada figura se perdía en la penumbra, pensando qué clase de cuadro haría con aquél pobre boceto. Con aquél fascinante recuerdo.
Mine Sagan- Ocupación : Músico
Mensajes : 1143
Fecha de inscripción : 30/04/2012
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