De la charla y la cena (Priv. Demian)

El sonido del taco prudente de mis zapatos hacía eco en la acera de una forma tan realista que podría confundirse con la pisada de cualquier humano, pero solo un fino oído podría distinguir la ligereza de mis pasos y la elegancia que, al igual que en mi compañero, fluía de nuestros cuerpos de forma natural.

El comprobar que no había ningún oído no deseado que pudiera oír nuestra charla, me atreví entonces a murmurar, a un rango medio normal de voz, la primera de mis intervenciones.

“-La verdad es que no me gustaría hacer de esta una entrevista. ¿Le parece bien si me cuenta lo que pueda por su cuenta y de igual manera haré yo? Con el claro permiso de indagar hasta donde el otro considere prudente, por supuesto. Si le soy sincero, soy ingenuo en cuanto a esta clase de cosas se trata, no temo exponerme demasiado a alguien como usted. ¿Se podría decir, que le guardo algo de injustificada confianza?-“ Ridículo, me sentía como un niño en todo su esplendor, pero era justamente eso lo que me permitía disfrutar del momento y de cada paso que dábamos. No temía ser juzgado por él, ni la impresión que podría llevarse de mi, por primera vez no me sentía con la necesidad de usar ese aire de superioridad, indiferencia y sensualidad que parecía venir dentro de cada una de nuestras células por inercia. Creo que era una clase de humildad. ¿Cómo sería que se sentía él?

Injustificada confianza??  es raro encontrar gente que piense de esa manera pero no te preocupes no tengo por que traicionarla haz sido un muy agradable y educado anfitrión

*dijo Demian aun mientras caminaba con calma, era sorprendente la forma de ser de Yuli, se podría decir que la confianza era mutua pues el estar a su lado le causaba una especie de nostalgia y paz, tenía tantas cosas que le gustaría saber de su ahora nuevo contacto en la ciudad, pero este le propuso una forma agradable de llevar el tema, por que una entrevista, si se puede tener una historia, era una forma interesante de ver las cosas y Demian sería el que comenzaría  con dicha historia*

soy un vampiro de sangre pura, aunque en un principio no lo sabía, la forma de la que funciona un puro en mi clan es que durante tu juventud vives, digamos que naces y creces como humano  y luego al alcanzar un punto clave de tu cuerpo este  despierta su verdadero ser, un inmortal de la noche, me críe en las calles de Italia, los humanos que creí mis padres fueron asesinados y yo era un huérfano, o eso pensaba, una noche ya cuando era mas grande la que me rescato de morir a manos de los humanos no fue mi madre de sangre fue una joven de nuestra misma raza una bella cantante llamada Beatrice*Las sombras les seguían mientras caminaban era un defecto curioso que cargaban los hombros de Demian, un poder sobre las mismas tan grande tan fuertes que estas lo seguían como si fueran una especie de animales siguiendo a su amo*
ella me rescato y se convirtió en mi Sire, mi maestra, me explico que ella también era una pura sangre que fue abandonada en su juventud,  ella me educo como un lord y me dio un nombre, su nombre, la verdad ya no recuerdo como me llamaba antes de ella ha pasado mucho desde esos días

*Demian saco una cigarrera negra de la cual saco un cigarrillo de color negro y cuando lo prendió este dejo escapar un fuerte pero delicado aroma a clavo, el humo jugaba al rededor del rostro perdido de Demian el cual recordaba a su maestra aquella bella mujer Beatrice....*

ella no solo me educo como era debido y me quito la persona de la baja que fui, me dio el mayor regalo que pude obtener, me enseño el arte que yo siempre desee, el arte de poder hacer música, me convertí en cantante bajo su tutela, pasaron muchos, muchos años me convertí en alguien muy famoso a su lado, un dia... desapareció, yo le había prometido seguir mi carrera y eso hice pero siempre le busque....*la mirada de Demian demostraba un fuerte dolor que atormentaba no solo su alma si no su cuerpo, daba la idea de que estaba vivo y sufría una gran perdida, las somrbas de la misma manera se agitaban ansiosas, demostrando la angustia que sintió su amo, cosa que a Demian no le agradaba, le hacía ver como un vampiro débil y frágil, cosa que le desagradaba en el* un día di con una información...una información que hasta la fecha me resulta increíble, en si apareció en el periodico de la epoca, que ella se encontraba muerta....que fue asesinada por una banda, fui a donde se encontraba dicha banda que me entere despues eran cazadores, lleno de ira, lleno de desgracia cante como el payaso esa noche mientras despedazaba a dicha banda hasta que quede afónico...no he vuelto a cantar desde esa noche....

*El vampiro dejo caer una  única y solitaria  lagrima junto al cigarrillo que sostenía, lo piso con fuerza paso un poco de tiempo en silencio , luego saco otro cigarrillo lo prendió y ofreció uno a Yuli* digamos que perdí las ganas y el interés de cantar de nuevo... pero bueno dime algo de ti, esto es una conversación no una cátedra de mi parte *dijo sonriendo con trabajos mientras caminaban*

Educado no era una palabra que me definiera muy a menudo, contrario a lo que podrían pensar, es más frecuente que las personas me llame arrogante, caprichoso, manipulador y falso por la forma en que me muevo, expreso y hablo. Y la verdad es que no me ofenden esos adjetivos ya que, de alguna u otra manera, puede que tengan un poco de razón.

Desde el comienzo del relato el vampiro a mi lado me pareció casi irreal. No solo no había conocido muchos de mi especie durante mi vida, sino que ésta era la primera vez que conocía a un sangre pura. Sí, había escuchado innumerables veces lo que ahora Demian explicaba. Esa vida más real que la mía, que el resto de nosotros. Sentía, lo admito, un cierto grado de envidia. No por su poder, sino por su relato, por morboso que pareciese disfrutar incluso de sus tragedias.

“-Beatrice-“ Repitieron mis labios finamente. Era un nombre exquisito que se deslizaba por mis labios como si con ello pudiera imaginar la figura de la mujer descrita, pero por más que buscase, la mente de mi semejante no era sino un cofre con candado sellado. Mi atención fue desviada por lo curioso que ocurría a nuestras espaldas: Las sombras. Seguramente parte de su poder y grandeza. Grandeza que vi deshacerse al ser consciente de que no era necesario indagar tanto. Fue el mismo transcurso del relato del mayor el que me entregó una imagen más o menos de la mujer y a su vez, una vulnerabilidad que desaceleró mis pasos, sorprendido por la emoción mostrada en cada fibra de su cuerpo, al punto que percibía en mi propia piel parte de su dolor. Dejé de respirar, no significaba un problema, pero el relato merecía el silencio absoluto, idea que ejecuté de forma inconsciente. Podía vislumbrar claramente la escena de la masacre, parte de los recuerdos abiertos de Demian.

¿Una lágrima?

Esta vez mis pasos se detuvieron y mi rostro automáticamente alejó la mirada del suyo. ¿Era líquida? ¿Era una lágrima como la de los humanos? ¿O era esa solución acuosa, sucia y levemente sanguinolenta que mis propios ojos podían derramar?

“-Temo que cualquier cosa que pueda contarte respecto a mi, es bastante irrelevante en comparación de lo que conmigo has compartido.-“ Con un gesto amable rechacé la oferta del cigarrillo y retomé la caminata. Podía ver a unos metros el comienzo del camino ascendiente hacia el mirador.

“-No guardo grandes memorias. Soy un humano que alguien convirtió en vampiro. No se bien quién fue y la verdad es que nunca sentí curiosidad al respecto. Fue como nacer de nuevo, con nuevas habilidades, nuevas necesidades.-“ Mis cejas se juntaron demostrando un poco del sentimiento vago que sentía respecto a mi propio origen.

“- Nunca me importó. Se podría decir que me adapté demasiado fácil a aceptar mi realidad y a disfrutar de ella. Supongo que incluso siendo humano, era una persona orgullosa y un poco soberbia.-” Alcé la vista al cielo, contando algunas de las estrellas más visibles.

“- Nunca he extrañado un amanecer, nunca he repudiado la sangre. Pero si hay algo que esta vida me impuso… fue la monotonía y la soledad…-“Una pausa larga se hizo presente, avancé unos pasos algo más rápidos que los de Demia y luego retomé el relato con la ligereza que representaba.

“- Me aburrí fácil de un mundo oscuro y basado en las religiones. Me asqueé de lo que veía y pensé en destruirme, sin embargo, no soy alguien a quien le guste perderlo todo. Mi propio orgullo solo me llevó a dormir por varios siglos hasta que hubo algo que revivió mi interés… La música.-” Y la siguiente pausa la hice para girarme hacia él, con una sonrisa misteriosa, pero confiable. La música era, posiblemente, uno de los pocos puntos en común en nuestras vidas.

*el escuchar el nombre de aquella bella mujer en boca de otro le trajo muchos recuerdos, recuerdos de cuando Beatrice y su nombre era dicho con gloría como una maravillosa cantante, suspiro y dio una fumada al cigarrillo mientras guardaba la cigarrera, ninguna historia carece de fuerza, se compare o no con otra las historias tienen poder, eso era algo que le gustaría poder explicarle a Yuli después, pero como el vampiro que caminaba a su lado hizo, el le dio el respeto necesario permaneciendo callado hasta el final de su historia.

Cada detalle le provocaba decirle algo, un comentario para que abrazara su pasado con el brillo que debía hubo entonces unas palabras que le hicieron pensar "monotonía y soledad acaso nuestra raza estaba condenada a eso....NO... me niego a creerlo así" eso era lo que pasaba por la cabeza del vampiro, pero el tenía algo, algo por lo que evitar esa monotonía esa soledad, su cisne...su nuevo cisne.

Las palabras de Yuli terminaron y una mirada que traía la misma vida de la noche se poso sobre el, a fin de cuentas era una agradable charla y estaba en compañía de alguien de su misma clase *

si me permites decirlo nunca des de menos una historia y mucho menos la compares, cada historia tiene vida propia vida que te otorga lo que eres hasta el día de hoy abraza tu historia y aprende lo mas que puedas de ella, eres un ser con el poder necesario para disfrutar de eso*tiro la colilla de su cigarro en un bote cercano a la subida del mirador, la caminata le había abierto el apetito, Demian sabía que su acompañante deseaba ver como se alimentaba, el tenía muchas formas y juegos pero mostraría el poder el control que Yuli deseaba ver, claro que antes terminaría la platica tan interesante*

sabes... yo buscaría de donde vienes... tu aroma, el poder que te rodea...no creo que seas simplemente un vampiro convertido y si lo eres puede que tu maestro allá sido un pura sangre, a riesgo de sonar grosero hueles como yo, salvo por un aroma a lobo, acaso te han dado problema los lupinos ? o los haz cazado, tu aroma a ellos es muy fuerte casi opaca el aroma de tu poderosa sangre, disculpa mi mala educación respecto al tema pero me llama mucho la atención eso

*pasos después llegaron al mirador habían parejas de todo tipo, cosa que incomodo bastante a Demian pues le recordó el tema de la soledad mencionado por Yuli, sin embargo el lugar era algo sorprendente, un digno lugar de disfrutarse tranquilo, algo oscuro, con una barda que permitía recargarse para ver la ciudad, entonces algo llamo la antención de Demian lo vio una pareja peleando o mejor dicho un tipo abusando de la inocencia de una joven, el tipo le gritaba a la joven, bella de cabello rozado largo de tez blanca y un delicado cuello, por mas que ella le suplico al que parecía su pareja y este le dijo algo que escucho Demian  "ella es mejor que tu", ese tipo de cosas eran las que hacían que el vampiro odiara a la humanidad, que clase de escoria rompería el corazón de una joven en un lugar así, no importaba ya, pronto ella lo olvidaría para siempre, para eso era el especial*

“-Creo que tienes razón… Pero es inevitable hablar así sobre ese periodo para mí.-“ Me excusé aunque puedo asegurar que su leve reproche no hizo más que darme un sentimiento confortante y algo cálido.

“- La verdad es que no siento la curiosidad sobre mi mismo. Hay otras cosas que me encantan más en este mundo que indagar en un pasado de tanto tiempo atrás-“ Respondí cortésmente para luego dar paso al silencio absoluto, escuchando su comentario respecto a mi aroma. Evité sonreír demasiado al oír sus palabras que, de alguna forma, me regocijaban el alma.

¿Tanto así era que el aroma de Ash impregnaba mi piel? ¿Qué debía contestar? Considerando el hecho de que es bien sabida la tensión entre ambas especies. ¿Qué opinaría Demian al respecto? ¿Qué reacción deseaba ver yo de él?
Contuve un suspiro y a cambio de éste dibujé una sonrisa traviesa en mis labios, una sonrisa juvenil y seductora conforme miraba la misma escena que Demian observaba en el mirador, a aquella pareja y su discusión. Para mí, aquello no era menos encantador que una declaración de amor, que un primer beso, que los susurros melosos que otra pareja se decía en una banca a nuestra derecha. El inicio y el fin de las cosas, siempre son hermosos para mí.

Dirigí mi sonrisa a Demian, caminando esta vez frente a él, acercándome a la parte más alta del mirador, a aquella baranda que hacía juego con las bancas y faroles del lugar. Me giré y continué hablando, aún faltaba la otra mitad de mi historia, la que de verdad valía la pena contar.

“-La soledad y la monotonía me llevaron a dormir por docientos años. No extrañé nada en mi sueño profundo, pero fue la música, las diferentes tonadas y melodías que llegaban a mis oídos, las que me hicieron sentir de nuevo la curiosidad por éste mundo. Y con ello, podría decir que encontré una mascota.-” La palabra se deslizó por mis labios de manera natural. Sin rodeos, aquel término explicaba no solo mi aroma actual, sino también el por qué me sentía encantado con el mundo otra vez y por qué me encontraba en aquella ciudad. Aunque claro, la noche aún comenzaba, y tal vez habría alguno que otro detalle que contar, sin embargo, ahora mi deseo de falso adolescente era esperar una respuesta y regocijarme en mi propia incertidumbre.

*las palabras de Yuli llamaron la atención de Demian, una sorprendida sonrisa se mostró en los labios del vampiro mientras que la palabra "mascota"  era muy interesante había escuchado de vampiros que capturaban hombres lobos y los usaban como armas, pero una mascota ese era un tema que se tenía que tratar un poco mas, era muy curioso el detalle cosa, que hizo sonreir a Demian no por el hecho si no por la sorpresa que le causaba sentir curiosidad sobre el tema, el jamas pensó que algún vampiro en su sano juicio tendría un lupino como mascota, pero si de algo estaba seguro es que Yuli era una persona muy cuerda quizás mas cuerda de lo que el era así que la curiosidad le quemaba por preguntarle mas sobre el tema, esto es una seríe de historias separadas le tocaba a el aun tenía mucho que contar y quizás después ese intrigante vampiro le contara mas sobre su vida y su mascota*

Mascota?? valla en verdad que eso es muy interesante, curioso a decir verdad, perdona que lo diga de esta manera mi estimado Yuli pero.....eres realmente un ser muy interesante, me alegro de haberme topado esta noche contigo, ahora por otra parte...venimos a cenar no ? la platica puede seguir después, seguro que te da curiosidad mi forma de cazar, lo digo por que mi curiosidad por ti cubre uno de esos puntos, que opinas si cazamos distintos objetivos esta noche, yo ya tengo al mio en la mira

*dijo aun manteniendo la sonrisa a causa de la sorpresa sobre el tema, Demian señalo a la joven que lloraba junto al barandal, mientras el que solía ser su pareja se alejaba sin importarle la joven sola* por cierto, mi historia apenas empieza tenemos una larga noche por delante piensa a donde mas me llevaras a pasear

*mencionó el vampiro guiñándole el ojo a su nuevo conocido o por que no nuevo amigo, el sabía que no fácil se encuentra uno un vampiro con la educación y porte de Yuli, pertenecíamos a una raza pequeña a comparación de los humanos o los licantropos, por que no ser amigo de alguien que le ofreció su confianza.

Lentamente después de esas palabras Demian se alejo en dirección a la desconsolada joven, este saco de su abrigo un elegante pañuelo de tela y se lo extendió a la joven, esta le miro recibiendolo, fue entonces cuando callo cautiva ante los poderes del vampiro, en cuanto sus cristalinos ojos se cruzaron con los ojos esmeraldas del vampiro la joven entro en un pequeño trance, se pudo notar como el pañuelo se escurría entre los dedos de la joven de cabellos rosas, no eran necesarios nombres, no palabras, ella simplemente se acerco a el inmersa en un un maravilloso y perfecto sueño, o eso era lo que su rostro demostraba cuando Demian giro su rostro con delicadeza acariciando primero sus labios y luego empujando su barbilla en dirección a Yuli.

Demian miro a su acompañante con una seductora pero aterradora sonrisa, le mostraba el poder que tenía sobre la joven como tenía una mirada perdida en el placer que el le causaba mucho antes de morderla, este era un show que le regalaba Demian a Yuli, con suavidad Demian acarició la mejilla y con delicadeza bajo la mano acariciando a la joven, primero su cuello luego su pecho, siguiendo por la cintura de la cual la agarro y jalo pegandola a el, cada roce de los dedos de Demian causaban expreciones de plaser en la muchacha ahora perdida en las garras del vampiro, la otra mano la uso para detener su cabeza, la lengua de Demian paso lentamente sobre sus labios saboreando lo que venía a continuación, abrió la boca lentamente cada ves mas según se acercaba al cuello no quería verse mal educado al abrir la boca como una bestia cualquiera,a l momento de la mordida la expresión de la joven fue única y literalmente se dejo ir en los brazos de  Demian, el vampiro se alimentaba*

"- El gusto es mio..-" Susurré con una fina sonrisa, asintiendo a su propuesta o casi reproche referente a nuestra cena y es que una buena charla no puede hacerse con el estómago vacío, en eso, estaba completamente de acuerdo, además de la obvia intriga que sentían por la naturaleza de cada uno.

No me acerqué sino lo necesario para observar los detalles de su caza, sin interrumpir su cuadro ni su "encanto". Aquello sin dudas, era algo cautivador de ver. Los movimientos de Demian le recordaban a un caballero de antaño, a un hombre de esos que hoy en día le parecían escasos fuera de alguna película. Incluso él, a cierta distancia, se encontró un poco sumergido en su mirada, en sus fauces, en cada movimiento ejercido. Mis propios labios se separaron con cierta ansiedad ante el espectáculo ofrecido. Era la primera vez que podía ver algo como eso y sentía algunos escalofríos recorrer mi espalda. Con ello, una idea aterradora pero seductora invadió mis pensamientos.

¿Cómo sería que él me mordiera?

No recordaba la sensación de ser perforado por esas finas cuchillas que se tenían por colmillos, no recordaba mi creación. Y ante el sentimiento nostálgico y la curiosidad, no pude evitar querer probarlo, aunque claro, no me atrevería a proponer tal cosa, no en primera instancia. Es más, me sentía ligeramente avergonzado de mis propios pensamientos y antes de que la imagen de estos pudiera ser leída, preferí desviar la mirada un segundo, pero al momento en que él la mordió, mi mirada volvió como imanes siendo atraídos por sus polos opuestos. Hermoso, simplemente hermoso y casi perfecto, aunque en la imperfección de las cosas había más belleza.

*lentamente separo sus colmillos del cuello de la joven y de un par de pequeñas heridas escurrían aun un par de gotas de sangre que el lamio con arta delicadesa y a la ves que las lamía su saliba hacía que las heridas se cerraran como si se tratasa de un ser igual que ellos. Los ojos de la joven de cabellos rosados tenía una mirada de completo extacis, demian acarisio el rostro de ella con el dorso de la mano y esta parecía que fuese a desmayarse del placer que le abordaba, tomo la mano de la joven la beso con delicadesa y con un suave gesto le dejo irse, esta paso junto a Yuli, su mirada a corta distancía no solo mostraba un completo plaser si no aparte un fuerte trance, mientras el vampiro italiano sacaba un elegante pañuelo de seda y limpiaba la comisura de sus labios por si había un rastro de sangre en estos, guardo el pañuelo y regreso al lado de Yuli*

no me gustan las muertes inecesarias, atraen demasiada atención inecesaria no crees?

*dijo recargandose en un poste de luz cercano mientras sacaba otro cigarro y lo prendía con el cuidado con el que agarraba a la joven, dejo salir una gran bocanada de humo el cual se convertia en pequeños murcielagos que se alejaban*

ahora se dirije a su casa y olvidara todo lo que paso conmigo y su corazon roto esta sanado, un pequeño regalo por alimentarme, ahora no es tu turno de mostrarme tus trucos amigo mio ? *dijo con una mirada profunda y peligrosa los siglos de vida se veían en esos ojos color esmeralda, los ojos de esa bestia*

"-Entonces ambos nos movemos bajo la misma política.-" Respondí y es que yo tampoco gustaba de muertes inecesarias, aunque entiéndase por inecesaria, aquella que pertenecía a personas que realmente podrían aportar en algo a la humanidad.

"-Lamento decepcionarte, mas no creo tener ningún truco, mucho menos, tener tu misma elegancia. Pero sería demasiado desconsiderado de mi parte no cumplir tu deseo cuando ya has saciado mi curiosidad. O tal vez... la has incrementado. De cualquier manera me temo, que para mi capricho, deberemos movernos un poco.-" Toqué mis propios labios como si en mi mente ya se tramara algo. Mis pasos gráciles y quizás más finos que los suyos se movieron por la oscuridad, caminando hasta llegar a divisar a la pareja de la muchacha que había sido cazada por Demian, lo iba a interceptar antes de que lograra abandonar aquel sector del mirador. Con un suave gesto de mi cabeza indiqué que comenzaría, no dudaba que Demian sería igual de prudente que yo. Mis labios se separaron en una sonrisa, el muchacho humano aún no se había percatado de mi presencia, avanzaba hacia a mi y antes de que su mirada, aquel sentido tan impresindible de los humanos, lograra encontrarme, comenzé a tararear una melodía, al comienzo en unos desibeles que probablemente solo demián y los perros del lugar podrían llegar a oír, luego comenzé a ajustarlo al oído humano, comencé a cantar en susurros mientras me acercaba a él. Entonces me divisó.



Para cuando eso ocurrió, el ya no podía escapar. Mi naturaleza se potenció, el muchacho entre estupefacto y sorprendido no se movió de su lugar. Seguí cantando y poco a poco sus pies continuaron el camino hacia mi. No, yo no podía controlarlo de igual forma que Demian, pero sí podía meterme en su cabeza y ver sus pensamientos, y confundirlo con los mios y crear una especie de realidad en la cual, si jugaba bien mis cartas, lograría hacer que obedeciera a mis deseos.

Toqué su rostro suavemente, a sus ojos, probablemente esto sería una clase de extraña y placentera pesadilla, eso era todo lo que podría darle. Aferrarme a sus secretos y mas profundos pensamientos y darle una ilusión temporal.

Mis manos acariciaron su nuca y nuestras respiraciones se rozaron, mis labios acariciaron los suyos y con un gesto refinado separé sus labios antes de unir los mios con él. Sin vergüenza, sin diferencia entre hombre o mujer, para mí, la comida era la misma, en un plato diferente. Y claro, sabía que mi modo de caza tenía ese mal hábito de acercarme mucho físicamente, tanto al comer como en todo lo demás, y eso era por haber pasado mucho tiempo mezclado con los humanos...y con Ash. Entendía que gran parte de su placer tenía relación al sentido del tacto.

Le besé lenta y profundamente, en ese mismo beso me apoderé de su lengua, un músculo exquisitamente irrigado, luego de que bajara la guardia y se entregara un poco a la inexplicable situación, en ese músculo inqué mis colmillos. La melodía continuaba, la había estado cantando aún en mi mente, en su mente sin permiso, sin que él pudiera evitar escuchar y caer ante ese, que era de cierto modo, mi pequeño hechizo. Comenzó a jadear en mis labios, en una mezcla infinita de sensaciones, placer, dolor, miedo, y ese ligero consuelo a un corazón lleno de mentiras. Ya me había robado su secreto.

Una vez me hube saciado con su sangre, me separé igual de suave y él, cayó al suelo violentamente, desmayado, presa de una ligera anemia de la cual despertaría probablemente, en menos de una hora. Considerando el lugar y los transeúntes recurrentes, decidí cargarlo hasta una banca, dejandolo en una postura que parecería que se hubiese quedado dormido sentado. Limpié el ligero rastro de sangre de la comisura de sus labios. Se veía casi cómico que un ser con mi contextura cargara con un hombre más corpulento, pero nadie ahí nos estaba mirando, después de todo la escena no había sido nada más que un beso apasionado, a los ojos de cualquiera.

Antes de voltearme a Demian, lamí mis labios, notándome insatisfecho, como si la sensación de satisfacción no hubiese durado en mí más de 3 segundos. ¿Porqué era eso? Tal vez porque ahora mismo mi interés radicaba en el hombre que tenía los ojos puesto en mí, y no en mi comida.

*Las palabras que le decía el vampiro eran lentas, delicadas y llenas de elogios, Yuli ciertamente era muy parecido a el, no pudo evitar preguntarse si dentro de Yuli habitaba un monstruo sádico como en su propio interior*

si dices que hay que movernos esta bien, con tal de poder apreciar la magia de tu caza en acción

*Dijo con una sonrisa calida y tranquila; los pasos de los dos comenzaron a dar hacía la victima de Yuli, en un segundo los pasos de Yuli dejaron de escucharse, "caminar como las sombras, una técnica de asesinos", no pudo evitar sentirse emocionado ante aquello, Yuli al que podría considerar su amigo en esos momentos,estaba haciendo su jugada iba a cazar pero ¿a quien?.

Fue entonces cuando lo vislumbro era el joven que solía ser pareja de la que fue su cena, curioso juego traía Yuli, este le miro y movió la cabeza anunciando que era su turno de actuar, Demian asintió con la cabeza y se escondió entre las sombras o mejor dicho estas se lo comieron, era prácticamente una sombra, solo podría ser visto por animales o otros seres sobre naturales, Demian coloco ambas manos en sus bolsillos y espero a ver la a Yuli actuar. Sus movimientos tenían gracia y de la nada un sonido, una melodía, una canción ¿acaso era un truco como el de una sirena? no...o no del todo Demian se dio no lo había encantado simplemente uso su encanto para atraer el interés de aquel joven, veía con detenimiento cada detalle o movimiento que hacía, no podía negar que era un tan despiadado como elegante.

Yuli comenzó a bezar a ése tipo, al principio llego a pensar que era una especie de seducción hasta que vio una pequeña gota carmesí en los labios de aquel sujeto, el beso sangriento, no le faltaba nada de estilo a su amigo, pero esa elección masculina le dio a entender algo, Yuli veía a todos por igual, no era tan selectivo como el, su selección seguramente se centraba mas en el capricho del momento, como en este caso, vio toda la escena y la gracia del vampiro hasta que este volteo a verle, lo que Demian hizo no fue mas que aplaudir, con una expresión de satisfacción ante aquel espectáculo, el sonido de los aplausos no era audible pues mas que nada era el movimiento para darle a entender que fue todo un espectáculo; se espero a que Yuli regresara a donde el estaba para que las sombras lo descubrieran*

magnifico estilo, lo he de probar alguna ves, aunque no te viste satisfecho del todo al final, ¿no sabía bien acaso?, por eso yo soy muy selectivo la sangre de las mujeres jamas me decepciona menos si son físicamente de mi agrado *le sonrió de manera algo ladina* muy bien y ¿ahora donde mi estimado guía ?  

*No podia negarlo Yuli le provocaba un interes especial, quería saber mas de el, le intrigaba, quería saber de sus poderes, como le dijo no todos los dias se encontraba a un hijo de a noche como el*

Mis mejillas se colorearon un poco cuando le vi gesticulando un aplauso, no era que en verdad deseara un reconocimiento, y el hecho de que lo hiciera me ponía en una situación incómoda en la que no sabía cómo actuar ni responder. Simplemente asentí cuando estuve a su lado, dispuesto a responder sus preguntas.

"-No realmente, cosas como el físico o el sexo no definen mi gusto por la sangre, no al menos en mi caso-" Aclaré omitiendo lo siguiente que iba a decir, y es que tal vez eso me dejaría al descubierto, pero si era por mis preferencias, la sangre más exquisita con la que me podía saciar, era con la del lobo con el que compartía desde los últimos varios años. Por esa misma razón, no era extraño que ultimamente hubiese seguido el hábito de no beber mas de media o un cuarto de dosis necesaria, y el resto lo bebia del lobo. Me era mucho más placentero, tal vez, de la misma manera en la que Demian se siente al elegir una mujer de su agrado.

"-Sin embargo, creo que el tema ahora va porque estoy más interesado en quién tengo al frente, que en mi comida. Lo cual no suele ser habitual, pero no voy a mentir Demian. Me intrigas lo suficiente como para desconcentrarme.-" Mis pasos avanzaron más allá de él y continuaron la caminata en dirección contraria a donde habia dejado al hombre aquel. Ciertamente no tenía planes o era que mi mente no se podía focalizar, y así tampoco podía abandonar la idea de querer tener un poco de contacto físico con él, por supuesto, no de una manera sexual, simplemente quería poder llegar a sentir el filo de sus colmillos como si intentara tocar el reflejo en un espejo.

"-Vamos donde nos lleve la noche, a menos que tengas algo más en mente.-"

No tienes que halagarme tanto Yuli, mi atención ya la tienes, me pareces alguien con quien vale la pena pasar el rato descubriendo mas y mas cosas*le comento con tranquilidad* no negare que me intrigas también el hay cosas de ti que me gustaría seguir descubriendo

*En parte Demian había quedado hipnotizado por la personalidad de Yuli, al igual que como le dijo Yuli a el, estaba intrigado y quería saber mas de el, ¿acaso el había caído ante los poderes de Yuli sin darse cuenta? no eso era imposible, solo hacía mucho que el no tenía contacto con alguien de su raza que fuera tan educado y propio como lo era Yuli*

Yo te prometí que te seguiría contando mi historia aunque resumida esta mas que claro que es larga, espero no te este aburriendo

*vio como Yuli se alejaba de el caminando y el vampiro de los ojos esmeralda le siguió* a donde nos lleve la noche pues aun es joven, aun tenemos a la luna de testigo*miro hacía el cielo con un aire de calma  tranquilidad, era curioso el siempre desconfiaba de los inmortales y el que Yuli tuviera un aroma tan fuerte a hombre lobo no le hacía sospechar menos de el, no había que leer su mente para saber que era una buena persona que no cazaría a los de su propia raza, Demian acelero el paso para quedar junto a al vampiro de cabellos blancos, era una curiosa combinación, el cabello negro azabache de el con el blanco puro de Yuli*

en que me quede? veamos... ahh ya, bueno entre los cazadores que masacre estaba uno que tenía una hermana inmortal, de nuestra raza, hija de mi sangre, ella juro hacerme lo que yo le hice a su hermano...curioso ¿no crees? *aventó la colilla del cigarro a un bote de basura cortando la braza con el golpe de la uña al aventarlo* si tienes duda en algo no dudes en preguntarlo por favor, de eso han pasado muchos años, pase un rato en letargo en forma de luto, luego comencé a ver esta nueva época llena de la misma clase de gente que en el pasado pero mas superficial que en esos entonces.

*acomodo su cola de caballo pasándola para atrás y miro a las parejas en el risco, una que otra que subía, gente viendo a unos artistas callejeros y dejando caer monedas en sus gorras en el suelo* realmente no ha cambiado mucho este mundo

"- No creo que se trate de una cuestión de halago, más sí de sinceridad. Pero puede tomarlo como quiera.-" Tras mis palabras dejé ir una pequeña risa, sintiendome cómodo con la compañía, asintiendo al Demian retomar su historia, asegurandole que por supuesto, aburrido no estaría.

"-Ciertamente es extraño, al menos lo sería para mi el amenazar de esa forma a alguien de mi pripia raza, mas desconozco los conclictos y más allá, cualquier tipo de protocolo que entre los nuestros pueda existir. Desde que desperté no recuerdo haber tenido contacto con ningún otro vampiro, aprendí a moverme, a beber y a manejar mis propias habilidades por mi cuenta. Al menos, tuve la facilidad de estar en un lugar donde no era el único ser "no humano".-" Respondí ante la explicación de su historia, la que por cierto me causaba muchas dudas, pero ahora mismo lo que mas me llamaba la atención era que, al igual que yo, Demian se había tomado el tiempo para descansar en un sueño profundo, tal y como yo lo hice alguna vez. ¿Era eso común en nosotros, los vampiros?

"-No podría decir quienes eran más superficiales, sin embargo, el mundo actual me cautiva más que el de antaño.-" Suspiré mientras poco a poco abandonabamos el lugar y buscábamos el camino hacia las calles de la ciudad.

"-Quizás mi pregunta sea algo imprudente, pero no puedo evitar preguntar. ¿Durante todos estos años, ha permanecido en soledad? ¿Nadie le acompaña actualmente? ¿Qué es lo que ahora mismo mantiene su atención en esta era y en este mundo?-" Mis ojos le miraron de reojo, con la intriga pintada en el rostro. Mis labios expresaban una ligera sonrisa y es que aunque no iba a sacar información de su cabeza a la fuerza, estaba atento a su respuesta y a la posibilidad de una mentira.

Con los años podría decir que para un vampiro es imposible mantenerse despierto, y solo.

*La presencia de Yuli le agradaba al viejo vampiro Italiano le hacía sentirse calmado, lo único que agitaba un poco su sentido de alerta era el aroma a lobo que traía pero para estos momentos ya lo había asimilado y lo pasaba por alto como si se tratara del aroma a coco del bloqueador que se llegaba a poner a veces para salir en la tarde, el que Yuli  fuera su publico para su historia, le reconfortaba era una historia que había permanecido escondida por muchos años y a veces esas cosas merecen conocer la libertad a veces, quizas no era toda su historia momento por momento pero hay que ser sinceros, si el no recordaba su nombre humano muchas cosas había olvidado con el tiempo ya y eso no afectaba el quien era*

¿aprendiste por tu cuenta? discúlpame por decir esto pero eso es impresionante, de no ser por mi maestra yo seguramente abría muerto de sed hace muchos años, ella fue la que me enseño todo, incluso el como ser el caballero que ves aquí ahora en un principio no era mas que un ladrón común, una rata de campo que creía que era diferente a los demás por ciertos trucos entre ellos la regeneración*miro su mano derecha por unos momentos durante la platica* en una ocasión hasta perdí esta mano por completo y creí que no la recuperaría...imagina mi sorpresa al día siguiente cuando tenía de nuevo huesos y un poco de carne sobre ella

*no era una platica normal, quien platica de perdida de miembros que reaparecen de un día al otro, pero bueno así eran los vampiros desde hace mucho y así seguirían siendo; entonces unas palabras que no esperaba llamaron por completo la atención de Demian, unas sencillas preguntas pero a la ves complejas, pues podrían dejar en claro sus puntos débiles y eso no era algo que el quisiera* la imprudencia solo existe cuando no hay confianza así que no te preocupes no es imprudente lo que preguntes, desde esa noche que mi una de mis primeros aprendices me dejo con una amenaza si, me aleje de aquellos humanos que teníamos como contactos en el ambiente de la música y así hasta quedar solo, luego entre en mi sueño, al despertar si pase bastante tiempo solo, aprendiendo sobre esta nueva sociedad este nuevo mundo, por así decirle.

*permaneció callado por unos segundos antes de continuar, dejando que el viendo agitara un poco su cabello y sus ropas, golpeando su pálido rostro*  no me acompaña nadie en estos momentos, pero tengo en mi vista dos objetivos, dos bellas jóvenes, cada una fuerte, pero las dos diferentes por completo al igual que mis deseos hacía  ellas, realmente eso es lo que me mantiene en esta era, aparte ya dormí mucho, quiero disfrutar de nuevo el estar despierto *dijo dedicandole una sonrisa de manera picara a Yuli* es curioso estoy hablando mucho...no suelo hacerlo así que por favor cuéntame mas de ti, yo ya hable mucho sobre mi.

"-Mentiría si asegurara algo como eso, pero he de suponer que así fue.-" No tenía otra explicación a lo natural que era para mi beber sangre, a la satisfacción que en ello conseguía y a la falta de recuerdos de aquella epoca en la que debí ser convertido.

"-Es inevitable pensar de aquella forma. Después de todo tenemos diferentes capacidades. Pero contamos con debilidades, tan absurdas como cualquier otra rata.-" Después de todo solo bastaban algunos rayos directos de sol para debilitarnos y dañarnos, y el simple fuego podía hacernos desaparecer como lo hace con un mero papel. Recordé con su relato los viejos días en los que Ash y yo no haciamos otra cosa sino descuartizarnos el uno al otro noche tras noche. En algún momento de aquella locura sádica, terminamos construyendo un lazo que permanecía hasta el día de hoy. Parte de eso se lo debía a la regeneración, de lo contrario, la primera vez que hablé con él hubiese sido la última.

No hay porque mencionar el resto de ocaciones, antes y después de aquella, en las que mi cuerpo inmortal había sufrido gran daño y luego de beber y descansar en un lugar oscuro y humedo, podía despertar como si hubiese vuelto a nacer.

Dejé los recuerdos de lado y presté atención a sus palabras. ¿La soledad entonces era un asunto común de todos nosotros?

"-Ya veo. Espero poder conocer a sus doncellas algún día que usted considere prudente. Serán dignas de mi respeto si han conseguido llamar la atención de un hombre como usted.-" No podía evitar intentar buscar alguna imagen o recuerdo que viniera de su pensamiento, sin indagar o él lo percibiría, mas al no tener resultado en los primeros segundos, decidí dejarlo para hablar un poco de mí.

"-No tengo mucho que contar. Actualmente vine persiguiendo un anhelo, tal como un adolescente. Deseo volver a formar una banda en esta ciudad. Antiguamente contaba con mi bajista y mi baterista, dos criaturas sobrenaturales. Actualmente solo conservo a mi baterista: El hombre lobo que mencioné.-" Aclaré con un deje de picardía asomado en los labios. "-Pero eso es todo. Es como si fuera un niño persiguiendo un sueño más simple de lo que podría plantearse. Pero no ha resultado nada fácil. Mi baterista no nos siguió por lo que debemos comenzar desde cero y con ello, comenzar nuestra vida aquí, ya no solo como espectros, sino como seres pertenecientes al mismo mundo de los humanos.-" Mis pasos se detuvieron, de este lugar ya no quedaba mucho que ver y me había distraído en la conversación. ¿Dónde era que ibamos a ir ahora?

"-¿Conoce el sello Merveilles? Aspiro a convertirme en vocalista de ese lugar.-" Confesé.