Antoinette Birdwhistle

Antoinette es japonesa realmente, por nacimiento y por madre, aunque vivió la mitad de su vida en Inglaterra, tierra natal de su padre. Su madre trabaja como directora de una cadena de casas de Té llamada “Epicurean Rose” mientras que su padre enseña técnicas de defensa a fuerzas de seguridad en Inglaterra, eso conlleva a la combinación de la misma entre delicadeza pero que sabe defenderse. Debido a que su abuela materna fue una Geisha reconocida en el pasado tanto Antoinette como su prima Charlotte demostraron tener un especial interés en la música, resultando qué Anto tuviera hermosa voz e inspiración para sus canciones. 
Los primero años de su vida vivió en Japón donde paso recuerdos y alegrías con su prima Charlotte, era una niña completamente normal, pero el destino tenia otras cosas para ella. A los 6 años, por razones de salud de su abuela paterna , sus padres y ella tuvieron que ir a Inglaterra, ahí es donde todo cambiaría. Mientras vivía en Inglaterra, Antoinette era el blanco de insultos y debigraciones verbales por parte de su familia paterna, incluso su propio abuelo la repudiaba al punto de desearle lo peor por ser mestiza, a pesar de todo era una alumna ejemplar, aunque con dificultades para socializar ya que fue arrancada de una cultura y metida en otra, y sumando que tenía algunos problemas con  sus compañeros que se la vivían molestando por ser extranjera. 
Soporto durante 5 años esos abusos hasta que la gota colmo el vaso, llegando al punto en que, durante una clase sin la supervision del profesor, uno de sus compañeros le corto sus largos cabellos hasta la altura de los hombros, la bomba había detonado logrando que Antoinette tomara un bolígrafo que tenia en su banco y se abalanzara sobre el muchacho, y de un solo golpe logro clavar dicho objeto en su ojo izquierdo. La escuela enloqueció y exigieron que fuera metida en un reformatorio, sus padres no querían eso y llegaron a un acuerdo donde su propio padre la metería en su programa de entrenamiento militar; estos aceptaron y retiraron cualquier tipo de cargo solo si se cumplía esa parte del trato. 
Con tan solo 11 años fue sumergida en toda una doctrina donde su padre le enseño los valores de reprimir sus emociones y no escuchar a los que no debía, buscando otras salidas a su cólera.
Fue entrenada en todo sentido, supervivencia, defensa personal con o sin armas, concentración y paciencia. La niña de 11 años salio a los 13 de aquel lugar, completamente cambiada, ya no era la muchachita de hermosa sonrisa y sueños  que cualquier adolescente tendría, ahora era una joven con un rostro serio y aire frió, suprimiendo todas sus emociones luego de varios fracasos, y claro que la idea de mandarla nuevamente a Inglaterra estaba fuera de toda discusión así que decidieron enviarla a Japón para que respirada nuevos aires y pudiera seguir un camino más tranquilo, claro, hospedándose en la casa de sus abuelos maternos que vivían en un templo donde aprendió sus tradiciones de familia, misma casa donde se encontraba su prima, asistiendo a escuelas distintas. 
Antoinette adoptó una apariencia más de delincuente juvenil como sukeban como método de protegerse y evitar cualquier parecido a su estadia en Inglaterra, se metía en peleas y era capaz de lastimas a otros jóvenes, su abuela preocupada hizo algo para evitar que su nieta cayera más bajo... Le comenzó a introducir en el arte de la música y danza. 
Contra todo pronóstico funcionó, Antoinette empezó a estar más tranquila y relajada, encontrando en la música su camino a sanar de a poco. 
Su abuela la inculco en el canto junto a su prima, le empezó a dar clases de canto para perfeccionarse, donde se basó en un estilo que la dejaba expresarse en cada palabra de cómo se siente por dentro y la liberaba de sus tensiones mientras iba a la escuela pública, aunque las cosas no cambiaron mucho, puesto que ella era bastante temida entre sus compañeros de clase, incluso mantuvo su aspecto de líder de una pandilla que defendían el sector de su escuela de manera violenta, rumores que eran ciertos pero mantuvo esa faceta oculta de sus familiares para no darles problemas
Ella sentía que no podía avanzar haciendo esas cosas, y comenzó a forjar un nuevo sueño, en donde ella deseaba poder dedicarse a la música. Pasaron cuatro años, ahora una Antoinette de 17 años, luego de mucha investigación, logro  obtener la información de la escuela Musette en Glass City, lo vio como una oportunidad perfecta para seguir lo que le gustaba, claramente su familia no tuvo objeción con ellos y le dieron su apoyo para ir a aquella ciudad y seguir lo que a ella realmente le apasionaba. Aunque su miedo es su propio carácter que pudiera arruinar lo que más desea en este mundo