¡io sono molto Stupido! ~priv. Andrew~

Había pasado muy poco tiempo desde que llegue, había estado en el internado de la escuela pero eso era temporalmente, aun no me decidía si quedarme en ese lugar o buscar algún departamento cerca de Glass City, es por ello que decidí ir a dar una vuelta, y llegue a la plaza central, me senté mirando a mi alrededor, había encontrado una linda banca, todo parecía de ensueño, aunque suspire un poco, la verdad es que el brillo de la ciudad me daba un poco de nostalgia, no terminaba de acostumbrarme del todo a ese tipo de vida, después de todo solo llevaba una semana no podía esperar mucho, sin embargo extrañaba la algarabía de la comida, el show tras bambalinas y toda esa excitación de estar en escena, pero no me importaba, estaba feliz, por fin solo, aunque demasiado solo, pensaba en que no me vendría un poco mal de compañía que no fuese mi familia, quizá más adelante con los amigos de la escuela pudiese llenar ese hueco, o al menos eso es lo que pensaba.

Estaba tan absorto en mis pensamientos que no me di cuenta del tipo que se había sentado a un costado mío, no era de extrañarse que mi apariencia fuera notable, no era del lugar y era joven, e incluso aparentaba algunos menos, no me molestaba mi apariencia, pero si era claro que no pertenecía a esa ciudad, el hombre se acerco a mí y eso me extraño, más que eso me incomodo un poco, y casi de forma instantánea sentí un leve tirón, jalo mi cartera de la bolsa, lo sostuve un poco pero no era muy fuerte así que me empujo y caí de sentón, me levante e intente correr detrás de el, era rápido, eso era claro pero si me iba más lejos terminaría por penderme entre la ciudad, ya había anochecido un poco, lo que más me asustaba es que no podría regresar en transporte o tomar un taxi a la academia, y no pensaba irme caminando sin embargo el hombre logro meterse por una calle y cuando intente pasar ya se había pasado

Comencé a maldecir en italiano quejándome en voz alta y suspire, termine preocupado y sentí un nudo en la garganta, traía mi credencial de la escuela y la tarjeta en donde recibía el dinero semanal que me mandaban desde Italia, y tendría que pasar un rollo antes de poder cobrar en unos días, me senté en la banca que estaba y me queje de nuevo frunciendo el ceño – maledizione, io sono molto Stupido…Da dio… -decía en voz alta mientras pensaba en que debía regresar y seria todo un lio, no tenia opción ya había caído el crepúsculo de la tarde y la noche se había avecinado, así que suspire pesadamente, no tenia opción, ahora debía irme en pie a la escuela y de allí llamar por teléfono, pero que tonto era.

Ese día Andrew había sido llamado por una clienta que vivía  en una casa muy lujosas  se trataba  una joven de unos 23 años que tenía una cena de gala con su nuevo esposo, al parecer su esposo era de case alta y ella de clase media alta, por lo que la joven le dijo sus cuñadas la criticaban mucho por ser una chica de casa humilde,  Andrew  al escuchar eso decidió ayudarla eligiéndole el atuendo y haciéndole un elegante peinado. Le dijo que esa noche causaría envidia entre ellas y que si podía le enviara una foto de la cara de sus cuñadas cuando la vean con ese estilo.

 Luego del trabajo y de ir a su casa a dejar sus cosas y alimentar a sus mascotas, el estilita decidió salir un rato a dar una vuelta y quizás tomar un café o algo así. Esa tarde salio de su departamento  vistiendo una camisa color  turquesa oscuro de mangas largas, en la parte de abajo  un pantalón negro  y unas zapatillas negras. Tomo su billetera y celular, saliendo de su departamento. Al salir del edificio noto que había una vacante en este y al parecer era el departamento junto al suyo.

Camino por las calles  viendo  las tiendas, mientras buscaba sus cigarrillos para prender uno. Últimamente se sentía muy solo y aunque tenía a sus mascotas no era lo mismo…necesitaba compañía bueno con apariencia humana, el no estaba acostumbrado a estar solo…detestaba la soledad, pero a veces su soledad lo llevaba a tomar malas decisiones, pero esta vez decidió que haría las cosas bien si encontraría una pareja seria de fiar y que valiera la pena….y sino…bueno siempre existen los amigos con derecho.

Mientras caminaba casi llegando hasta la plaza central pensando en sus cosas, puedo notar algo que le llamo la atención, al parecer un hombre que le había robado a alguien. Como detestaba eso, después decían que los demonios era las criaturas desagradables….había humano mil veces peores que los demonios que el había conocido. Sin dudarlo Andrew se puso en medio del camino, para el ladrón el peligris no era nada, un golpe y lo quedaría del camino, pero lo que el no sabia es que Andrew era un demonio, con calma uso sus poderes, manipulando sus sombras, saco del suelo dos extremidades que sujetaron al ladrón haciéndolo caer de cara la suelo rompiéndole algunos dientes, cuando este cae Andrew se le acerco tomando el bolso que había robado- ahora...veamos a quien le perteneces-dijo el mayor buscando una identificación o algo así, por suerte la encontró-Trovatello…Noel…-leyó el nombre que estaba en la identificación, luego noto la foto del joven, era un estudiante de esa academia de canto que estaba en la ciudad, también noto que era un joven muy atractivo-mhmm…si que es lindo-pensó mientras caminaba en dirección a la academia atravesando la plaza , cuando vio al dueño del bolso-es el…-dijo se veía mas lindo en persona que en la foto, sonriendo se acerco al banco-creo que esto te pertenece, no joven Trovatello?-dijo colocándose frente a el y dándole su bolso.

vestimenta :

Casi había perdido toda esperanza, suspire mirando al cielo de nuevo, debía irme ya que mas tarde sería un lio, cuando sentí una presencia cerca y trague saliva ¿podría ser uno de sus amigos? ¿tan vulnerable podía verme? Pero me levante y lo observe, era un joven, bien parecido, vestido de forma casual, y muy bien arreglado, no pude evitar mirarlo por unos momentos antes de reaccionar, era alguien realmente guapo, pero volví a mi realidad y volví a sentir ese nudo en la garganta y un vuelco en el estomago de el solo hecho de pensar que regresaría caminando, sin embargo sus palabras me hicieron sentir un calor de alivio y mi rostro emano una sonrisa que fue difícil ocultarla
-¡Grazie, Grazie! –lo tome con suavidad y lo revise, no porque desconfiara de mi salvador, si no porque el ladrón pudo haber tenido la oportunidad para sacar todo lo que tenia, mas no había podido hacer nada todo estaba tal cual me lo había quitado, y eso me hizo sentir de nuevo un calor de satisfacción y abrigo, pensé entonces en varias cosas, la primera es que debía de ser más precavido y la segunda es que necesitaba un transporte para moverme, quizá más adelante hablando con mis padres podría conseguir alguna motocicleta, no era la primera vez que usaba una, sin embargo me sacaría del apuro - ¡molto grazie!, intente alcanzar a ese hombre pero me fue inútil, quizá debo de tener mas cuidado, de verdad molto grazie- iba a presentarme pero era lo más lógico, que hubiese visto mis documentos para saber a quién le había robado y fue claro pues ya sabía mi nombre- Soy …bueno.. ya lo sabe ¿Cuál es tuyo nombre? –Dije con una sonrisa, después de haberse presentado eche un vistazo a mi alrededor- déjeme compensarlo… ¿puedo invitarle algo? ¿un café? ¿Algo para cenar?

Estaba muy contento, de todas formas ya había dado por perdido todo el dinero que tenía en mi bolso así que el hecho de que yo invitara la cena o una bebida no sería problema alguno, además de que aun tenia la tarjeta de crédito y algo de sobra, sin duda seria una linda noche, no parecía ser de la escuela, ¿quizá un trabajador de por allí cerca que había visto lo ocurrido?, bueno ya no quise preguntarle más, después de todo había sido mi salvador y debía compensarlo con lo que fuese, además de todo, no me molestaba compartir un momento o un café con un joven tan guapo como el que tenía enfrente.

No pudo evitar sonreír al ver al rubio feliz y con el alma al cuerpo  al ver que recupero su bolso con todas pertenencias. Además  de ver la alegría del joven, pudo notar por el acento que se trataba de un estudiante de italiano-ohoo un extranjero, un joven Italiano por lo que veo…si hace poco te mudaste a esta ciudad te aconsejo tener cuidado con algunas personas…se aprovechan mucho de los extranjeros-le advirtió-es mejor que uses un morral y lo pones delante de ti así le será mas difícil sacártelo…y si busca uno de color café, seria perfecto así podrías combinarlo con todo ya que es un color  básico-le aconsejo un poco.



Se ríe por lo bajo-si ya se su nombre Joven Noel Trovatello, lo leí en su identificación-dijo y luego tomo la mano del joven y se inclino un poco-permítame presentarme soy Andrew…Andrew Dollanganger-como un caballero antiguo beso el dorso de la mano ajena, luego de deparar sus labios de esa suave piel, su mirada se alzo, mirando al rubio con su ojos visible de color dorado-es un gusto conocerlo en persona joven Noel…y déjeme decirle que se ve mas encantador en persona que en fotos-dijo halagando y coqueteando un poco al italiano. Soltó la mano y volvió a enderezarse –sería un placer aceptar esa recompensa…Hay una cafetería que esta en frente de la plaza centras y su café en muy bueno-dijo el mayor-eso si…aceptare la propuesta con una condición…si me deja pagar mi parte, a pesar de que lo ayude y quiere recompensarme, no puedo aceptar que me pague…me sentiría mal, espero que me entienda-