[Priv. Nath Aldridge] Lost One's Weeping

«“¿De verdad estás seguro de que esto traerá un equilibrio, Tsubasa? Parece solo el berrinche y capricho de un niño más, tu tarea aquí es más importante que una estúpida escuela enfocada en artes”»

Recordaba muy bien las palabras de sus padres antes de tomar aquella decisión de tomar el vuelo, su mente había divagado en todo lo que eso podría significar, cómo mantener el estatus del apellido Mochizuki como clan de exorcistas o simplemente el que tengan la razón y solo era un capricho que el más joven del clan tenía.

Sacudió la cabeza, no tenía por qué echarse atrás por algo como eso, no debía permitirse desviarse nuevamente, había dos objetivos que tenía en mente, mismos que debía cumplir para no tener una estadía vana en una vida más mundana que lo que anteriormente no compartía más que en momentos de ocio o estudio general.

Avanzaba por los pasillos tratando de callar la voz en su interior, la voz que le recordaba que tarde o temprano volvería, la voz que le decía que pronto resurgirá con su verdadera naturaleza, con su verdadero karma.

Al sentir que chocó con algo —o en este caso alguien—, inmediatamente salió de sus pensamientos, mirando así al chico de cabellera rosada, sus mejillas inmediatamente adquirieron un color carmín, debía ser precavido con lo que hace, por donde va. —Lo siento, debí haberme fijado por dónde iba.— se disculpó casi de manera inmediata, en un reflejo de su torpeza.

Otro día de escuela, otro día donde mi mañana fue horrible porque el despertar me costo más de lo normal, tener pesadillas toda la noche no era algo que ayudara con mi descanso mental y corporal, a veces me gustaría tener algún tipo de poder y dejar de sentirme tan malditamente cansado todo el tiempo...-Hoy dormiré con mis hermanos..-hable en un susurro conmigo mismo.

Seguí mi caminata por los largos pasillos de la prestigiosa escuela a la que ahora pertenecía, todas las mañanas  debía  hacer un largo viaje para poder llegar temprano a clases, después de todo decidimos que no me quedaría en los dormitorios. Un bostezo se cruzo por mi rostro, tape mi boca para luego sacar mi teléfono y revisar los mensajes de animo de ambos hermanos mayores, per solo procedí a darles like para luego ingresar a mi cuenta de ig (de Hailey) y notar el mensaje de mi "amiga" Juli, la cual sin falta me deseaba un buen día, sonreí al ver el mensaje, decidiendo contestar con un "buen día para ti también", cuando mis dedos mandaron el mensaje fue que sentí un empujón por parte de alguien que claramente choco conmigo, haciéndome perder el equilibrio, no tanto como para hacerme caer pero si para retroceder unos pasos.

Mi expresión cambio por un momento, como instintivo, pensé que alguien había hacho aquello a propósito, mi mirada fulminante llego a un chico que se encontraba frente a mi, cuando nuestros ojos se encontraron, note que estaba preocupado y algo avergonzado por lo que mi expresión de matar fue sustituida por una sonrisa amble.-¡Oh! aquello de verdad me asusto, pensé que me caería.-le hable mientras colocaba una mano en mi pecho como si aquello casi me matara del susto.

Note que era unos centímetros más bajo que yo, su aura era un poco extraña, pero no sentía peligro al estar cerca de él, aquel choque me había dejado alerta y ahora era algo difícil bajar mi guardia, pero algo dentro de mi me decía que quizá no era alguien a quien temerle.-también discúlpame, no vi por donde iba, estaba mandado un mensaje algo distraído-le dedique una mirada un poco preocupada-¿no te hiciste daño?

Volví a pasar mi mirada de arriba hacia abajo, como si revisara que estuviera realmente bien, permitiéndome notar que traía, y poder grabarme su imagen en mi cabeza, quizá luego hiciera una revisión de antecedentes.-Veo que no te hiciste daño, eso es bueno-sonreí- por cierto, Soy Nath de segundo, soy nuevo, llevo unos días aquí y tú ¿Cómo te llamas?-volví a sonreírle, ladeando un poco la cabeza demostrando un tipo de curiosidad por su persona.