(Privado) Ensayo de bailarinas y algo más (?)

Sorpresivamente habái recibido una carta por parte del Sello aquel día. Si bien no eran noticias sobre algún manager o alguna actividad relacionada a su recien iniciada vida de cantante, la Diosa Fortuna le había sonreido dándole al menos una actividad importante dentro de Merveilles Records: La Fiesta de Halloween en el Devil Stage. No como cantante, sino como bailarina. "Algo es algo".

Desde temprano se dirigió hacia el lugar indicado para encontrarse con quien sería su compañera de escenario -cuyo nombre no se le había revelado- entró al salón de baile, dejó su mochila en una de als bancas que estaban y se puso a calentar en lo que su nueva compañera llegaba. —Me pregunto cómo será— Se encogio los hombros.

Después de un tiempo, se volvio a escuchar la puerta del lugar que se abría, y para sorpresa de la finlandesa, resultó ser una persona ya conocida.

Vestimenta:

- ¿Tengo que?... Mierda. - Tiré la carta mientras habría la segunda botella de vino del día.

Por alguna extraña razón ahora tenía que presentarme como bailarina para el evento de Halloween en Devil Stage. ¿Acaso Reagan piensa que necesito otra cosa que hacer en mi vida?. Pedí ser profesora para su escuela, no una bailarina.
No tenía otra elección mas que obedecer. Como lo de mi condición como inmortal o lo que sea que soy.

Antes de irse mi madre me advirtió que ahora que era consciente de que podía recuperarme y sanarme, me tomaría tiempo controlar mi cuerpo y evitaría que muchas cosas me hicieran efecto en las dosis humanas comunes. No podía emborracharme y el cigarro no me provocaba nada. Justamente lo que necesitaba era no pensar en lo que era, y no podía evitarlo.

Me fui en ropa deportiva y con botella de vino al carro nuevo que compré y manejé hasta donde iba a ser las practicas, realmente solo buscando hacer mi trabajo a las horas indicadas y no perder mas tiempo en ello. Me estacioné en donde sea para luego entrar abruptamente al salón de baile.

- Buenas tardes - respondí con mi usual tono profesional. Pero mi cara quedó en blanco cuando me di cuenta quien estaba ahi. La conocía, era la chica del club con la que tuve sexo salvaje. Y trabajaba para esta industria.

Proseguí a mi plan. Dejé mi mochila y mi botella de vino a un lado para ir a calentar a su lado.

- ¿Eres mi compañera de baile para Devil Stage? Soy Kath Howell, espero que logremos sacar esto adelante - proseguí en mi tono frío y serio.

apariencia:

Aún incrédula por tan nteresante coincidencia sólo saludó cortésmente a la morena ¿Tan bromista era el destino para ponerlas a las dos juntas? —Sí, soy yo...— Aunque se le hacia notorio que Katherina fingiera no poder conocerla. ¡Era claro que una chica como Andrea en una noche como la anterior era casi imposible de olvidar. —¡Mucho gusto!...Soy Andrea Laakkonen. Igual espero lograr esto

Empezó a mover sus brazos y luego tocar la punta de sus pies sin doblar las piernas. —¿Sabes? No tienes que comportarte fría conmigo, y menos negar que me conoces y lo que hicimos en mi apartamento aquella noche. Tenemos que ser profesionales y maduras— Comentó sin rodeos, cambiando a estirar sus brazos hacia arriba. —No sabía que trabajabas en este lugar.

La rubia siguió la corriente. Excelente, un problema menos que lidiar, lo último que quería era más estrés del que ya tenia, era suficiente con la escuela, la prensa y mi maldito cuerpo.
El vino aun no sentía los efectos del alcohol en mi cerebro. Aun podía caminar sin fallar un paso, y no estaba demasiado sensible.
Pero claro, al parecer Andrea quiere poner a prueba como reacciono, y averiguar si puedo ser una borracha.

- Para mi la profesionalidad es no acostarme con mis compañeros de trabajo - Comenté en voz baja, no quería que el personal se enterara de cosas que no deseara.

Empece a articular mis brazos en círculos, hacia adelante y hacia atrás.

- Vine aquí a entrenar contigo, soy profesional y madura no hablando de cosas personales - respondí algo molesta, sin emplear un tono de voz venenoso. Tampoco quería acorralarla contra mi, sino esto se complicaría mas.

Empecé a elevar mis piernas intercalandolas, procurando alzar mis rodillas lo mas alto posible.

- Soy profesora de Musette... ¿Tu?

Esto me recordaba a como me di cuenta de que mis amantes al parecer no llegaron a reconocerme cuando mi cara salió en las noticias debido al accidente. Los aliases y la falta de fotos entre nosotros tendría sentido, pero tal vez el hecho de que estuvieran alcoholizados serviría para que no me reconocieran.
Mi estrategia ha dado frutos, nadie sabe de mi estilo de vida desenfrenado.

- Andrea.. ¿Entiendes que si hablamos mas de esto puede ser un riesgo para nuestra imagen no?

Se detuvo y solo llevó sus manos a las caderas al escuchar a Katherine tan seca. —Bueno, cariño, no debes preocuparte ni por una, ni por otra; ya tengo pareja y pues no creo que eso se repita— Se giró y empezó a estirar sus brazos.

—Soy cantante del Sello, me aceptaron no hace mucho...— Luego comprendió el por qué de la actitud de Katherine. —¿Profesora? ¡Vaya que interesante coincidencia!....Ella también lo es— Esto lo encontraba divertido, pero tal vez incómodo si Sora se enteraba de esto.

Hizo un cambio a tocar las puntas de sus pies con sus manos, pero Katherine llamó su atención, lo que la hizo girarse. Pensativa se llevó su índica a su mejilla —Entiendo...Bueno, yo no soy alguien de negar que tengo relaciones casuales, claro, cuando estoy soltera...— Mantuvo su timbre de voz moderado para que algún oído morboso no escuchara. —Pero cómo veo lo importante que es esto para ti, seré lo suficiente discreta, cariño— Después de eso le guiñó pícara y un tanto bromista a Katherine.

—Por cierto, intenté contactarme contigo unos días después...— Haciendo memoria de chismes que escuchó en los medios esos días. —Supe de un "accidente" que hubo con una profesora de Musette ¿Fuiste tú, cierto?

Me limité a asentir a su declaración. No tenía intenciones de repetir esa noche ahora que ella trabajaba en el sello. Y más ahora que tenía pareja, acostarme con gente ya con relaciones no era lo mío.
¿Además su novia también era profesora? Con mayor razón iba a evitar a las dos después de este evento.

Pero a mi no me daba gracia, pero esperaba que si mantuviera su discreción como se lo pedí.
Mi imagen pública estaba bien calculada, era la dama de Liverpool, la mujer que poseía un porte y carisma que se balanceaba entre nobleza y erotismo. No es que la prensa nunca hubiera recibido declaraciones mías de como me encantaba divertirme en la noche o aceptaba citas de otros artistas o personajes del medio del espectáculo.
Pero la prensa no sabia que yo era una gran puta que se acuesta con hombres y mujeres diferentes todas las semanas. En mi vida privada era una mujer vulgar.

- ¿en serio? No recuerdo haberte dado mi número... disculpa de no responder - y si se lo había dado, era del teléfono que usaba para mis escapadas sexuales, que fue perdida total. No habría manera de que mis vecinos ojeos amantes se hubieran contactado conmigo a menos que habría sido de mi perfil en línea. - Si, fui yo... Pero estoy mejor. Volví a trabajar apenas puse un pie fuera del hospital.

Y dudaba volver a ponerlo de nuevo ahora con esta nueva habilidad que poseía. Pensar que el fruto de la vida me salvó de una muerte que yo deseaba fue irónico.
Ahora solo quedaba vivir, trabajar y tener sexo; la rutina de toda mi vida.

Cruzándose de brazos, movió los labios ante tal respuesta. —¿Así de distante es con todos sus amantes?— Pensó. —Bueno, tu capacidad para dedicarte al trabajo es admirable...— Comentó al girarse —Pero, a veces es bueno olvidar el trabajo de vez en cuando— Prosiguió a tocar las pntas de sus pies con sus manos.

—¿Y qué te gustaría empezar desde ahora? Estaba viendo que sólo quieren algo de acuerdo a la época, pero a elección nuestra— Decidió cambiar el tema antes que esto pudiera tornarse más incómodo.

- Te diré algo. Yo tengo una sola estrategia en vida, y esa es no mezclar trabajo y vida personal. En mi tiempo para mi rehuyo de todo lo que tenga que ver con la industria de la música... Soy así contigo ahora por que eres un desliz que no me permito tener... Perdona que quiera actuar así contigo

Si ella lo que quería es que fuera honesta conmigo, lo habría logrado. Por que mi vida debe ser perfecta y cumplir con mis estándares establecidos años atrás.
Cambié de ejercicio y empecé a mover las caderas en círculos, aun siendo parte del calentamiento que debíamos hacer antes de trabajar la coreografía.

- Estaba pensando en que nuestras indumentarias fueran ad hoc, disfraces, pero que nos den el rango de movimiento que necesitamos - levanté la mirada mientras seguía recordando lo que había pensado - Y bueno, podemos mostrar o vestirnos tanto como querramos, es un evento para adultos.

Sin mostrarse molesta u ofendida por la respuesta de Kath, ella asintió comprensiva. —Bueno, son motivos muy respetables linda. Haré de cuenta que sólo nos hemos visto de reojo una par de ocasiones y nada más, pero no esperes que no me porte amigable contigo algunas veces— Finalizó con un guiño.

Acabó de calentar para entender la sugerencia que tenía Katherine. —Bueno, no me molesta por ahí tentar varias miradas y más si para un evento de tal magnitud esperan ese..."erotismo". Apruebo la idea, temática de infierno, ocultismo, brujería y demás suena bien. Creo que un leotardo quedaría bien, sin revelar mucho, pero lo suficiente para atrapar a la audiencia. Algo de maquillaje, y una diadema que pueda mostrar el personaje que representamos.