Estirándome hacia el cielo(Libre)

-Bueno, para mí es un honor poder tocar para alguien. Por eso lo digo- Le sonrió dulcemente. -¡No tiene por qué agradecerme.
La joven Yuki tomó sus cosas para ponerse a lado de Lucia y seguirla. -Jeje, sí. Yo tampoco como desde el almuerzo, y la verdad comí algo ligero. No sé si aún siga abierta la cafetería o quiera comprar algo en la tienda que está enfrente de la escuela- Miró a la chica con curiosidad para ver qué opinaba ella. -A no ser que quiera comer algo en especial.

Mmmm, veamos, todo depende del toque de queda, no queremos que nos regañen¿verdad?


Los alumnos de Musette teníamos ciertos horarios que debíamos respetar, sobre todos los internos. Tomé el celular y revisé la hora.- son las 19:30, si no mal recuerdo la cafetería debería dejar de atender a eso de las 20:30 ya que a las 21 por reglamento debemos estar en las habitaciones- Guardó su celular en su bolso de deporte- Me cambiaré rápidamente y vamos! los camerinos están cerca de la sala, así que espérame un momento, no tardo!

En poco tiempo, Lucia estaba allí otra vez con su uniforme del colegio puesto- me hubiese gustado darme un baño~ pero es mejor cuando es antes de dormir, jaja. Vamos allí mejor, es más factible 

-Jeje tienes razón. No me gustaría que en mi primera semana de clases me castiguen por andar fuera de horario...y tampoco que una compañera le suceda lo mismo por mi culpa.

Esperó a ver qué decisión tomaba Lucía, comprendía incluso si declinaba ya que la hora que debían volver no estaba muy lejos, pero al parecer no habría problema, así que la japonesa sonrió feliz. -¡De acuerdo! Esperaré- Se fue al lugar donde acordó verla una vez que se cambiara.

Risueña a su comentario comentó. -Jeje Sí, es mucho más relajante. Yo la verdad extraño entrar al ofuro...- No tenía muchos días fuera de Japón, pero sí notaba la diferencia. -Aunque aun así también disfruto bañarme antes de dormir

Entendía muy bien la preocupación de Yuki, ya no podía llamar más la atención de lo que lo hacía con la costumbre de siempre andar tan de prisa, corriendo, saltando o bailando por ahí en los pasillos. Sobre todo en las mañanas, tenía un sueño bastante profundo y se quedaba dormida seguido así que tenía que correr siempre para llegar justo a tiempo a cada clase.

Gracias por esperarme!Vamos-Tomó su bolso donde había guardado todas sus cosas y emprendió camino con Yuki a la cafetería, allí podrían hablar mejor.